Al menos 26 personas murieron y 70 personas resultaron heridas por varias explosiones registradas hoy en una fábrica de pirotecnia en el municipio de Tultepec, en el central estado de México.
La explosión en un mercado de fuegos artificiales en la localidad de Tultepec, a unos 50 kilómetros al norte de la capital, arrojó hasta ahora al menos 26 muertos y unos 70 heridos, según los primeros informes, consignó la agencia alemana DPA.
"Ya se llevó a cabo el levantamiento de 26 cuerpos", dijo el fiscal del Estado de México, Alejandro Gómez; mientras que la Policía Federal había informado antes de 70 heridos.
La mayoría de los 300 locales de venta de petardos quedaron reducidos a cenizas tras el estallido de toneladas de explosivos, que se escuchó varios kilómetros a la redonda.
Elementos del Ejército y de la Policía acudieron a la zona, junto con vehículos de los cuerpos de socorro, que iniciaron el traslado de los lesionados hacia diversos hospitales, por medio de helicópteros, a las cercanas ciudades de Cuautitlán, Naucalpan, Coacalco, Tultitlán y la capital. Según informes de los cuerpos de bomberos, entre los fallecidos figuran dos niños.
La explosión ocurrió en momentos de gran afluencia de personas, y se calcula que habría más de 2.000 visitantes, contando quienes se hallaban comiendo en varios restaurantes localizados fuera del mercado. A las 14.50 locales (17.50 de Argentina) ocurrió el estallido consecuencia de una reacción en cadena, que por ahora se ignora dónde comenzó.
Las imágenes televisivas mostraron una enorme columna de humo blanco y estallidos sucesivos, que tronaban como fuegos artificiales. La mayoría de los 300 puestos del mercado quedaron calcinados. Ambulancias, helicópteros y cuerpos de rescate acudieron al lugar y sacaron a personas en camillas mientras se oían las sirenas.
El gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, dijo que la fiscalía general encabezará las investigaciones para determinar las causas y posibles responsables de la tragedia. Las autoridades demandaron a los curiosos mantenerse alejados y evitar la zona para permitir el paso de los vehículos de emergencia.
Una densa nube generada por la explosión se desplazó debido a la dirección del viento, con rumbo a las localidades de Tultitlán y Tlalnepantla.
En 2006 y 2007 hubo explosiones que destruyeron la totalidad del mercado, pero la situación se repitió a pesar de las fuertes medidas de seguridad adoptadas. Tultepec es considerada la capital de los fuegos artificiales y se estima que el 80 por ciento de las personas se dedican a su elaboración en pequeños talleres artesanales.
En 2013 hubo 16 muertos y 153 heridos en una explosión accidental de cohetes durante una procesión religiosa en el estado de Tlaxcala, mientras que el 31 de diciembre de 2003 hubo 28 muertos por una explosión de pirotecnia en un mercado del estado de Veracruz, este del país.
Sólo escombros
En imágenes de la cadena Televisa del momento del incidente se observaba una serie de explosiones multicolores que provocan un enorme hongo de humo que cubre una gran extensión de terreno.
"El mercado en su totalidad desapareció", añadió Puente al detallar que varias viviendas cercanas a la zona y automóviles resultaron dañados por la deflagración.
"Mis condolencias a los familiares de quienes perdieron la vida en este accidente y mis deseos de pronta recuperación para los lesionados", escribió de su lado el presidente Enrique Peña Nieto en Twitter.
Televisoras locales mostraron imágenes de un amplio terreno sembrado de escombros calcinados y rodeado de ambulancias y camiones de bomberos.
Hasta el lugar también llegaron elementos del Ejército mexicano, la autoridad encargada de entregar los permisos de venta de pirotecnia, además de equipos de emergencia de las entidades vecinas para trasladar a los heridos por vía terrestre y con helicópteros.
Las autoridades investigan la causa de la deflagración, que pudo ser un mal manejo de la pólvora, situación que años atrás ha desatado grandes explosiones.
El 15 de septiembre de 2005, cuando también se comerciaban grandes cantidades de juegos artificiales por la fiesta de Independencia, un incendio y explosiones consumieron el mercado en su totalidad. Al año siguiente, otro accidente destruyó más de 200 puestos.