Se cumplen hoy 67 años de la coronación del mendocino Pascual Pérez como campeón del peso mosca en los Juegos Olímpicos de Londres, al vencer por decisión al italiano Espartaco Bandinelli.
El 20 de agosto de 1948 el 'Pequeño Gigante' ratificó sus dotes de fantástico amateur (ya había sido campeón novicio, mendocino, argentino, rioplatense y latinoamericano) y sumó el sexto oro para el boxeo argentino en los Juegos de Londres, tras superar, además de a Bandinelli al filipino Ricardo Adolfo, al sudafricano Desmond Williams, al belga Alex Bollaert y al checo Frantisek Majdloch.
A la hora de intentar clasificarse para los Juegos de Helsinski 52 se consumó la curiosidad de que Pascualito perdió ante Francisco Calvagno, un traspié que sin embargo no obstó para que el 14 de noviembre de 1952 se retire con una admirable foja de 125 peleas como boxeador aficionado y 16 títulos.
Si en su paso por el amateurismo Pascualito fue destacado, en el profesionalismo alcanzó las altas cumbres, merodeó la excelencia, y tanto que más de un sabio de las tribus boxísticas afirmó que Pérez fue, sin más, el más talentoso pugilista nacido en la Argentina.
Debutó como rentado en 1953, ganó 18 veces seguidas por fuera de combate, el 11 de noviembre de ese año se alzó con el título argentino al noquear en cuatro asaltos a Marcelo Quiroga y el 16 de noviembre de 1954, en el estadio Korakuen de Tokio, derrotó por decisión unánime al japonés Yoshio Shirai y se constituyó en el primer boxeador de los 40 argentinos que hasta hoy ganaron una corona mundial.
Realizó una defensa airosa en 1955 (el desquite con Shirai), dos en 1956 (con el filipino Leo Espinosa y el cubano Oscar Suárez), dos en 1957 (con el británico Dai Dower y el español Young Martin), dos en 1958 (con el venezolano Ramón Arias y el filipino Dommy Ursua) y otras dos en 1959, con los japoneses Kenji Yonekura y Sadao Yaoita.
La horma de su zapato fue el tailandés Pone Kingpetch, quien le arrebató el título en Bangkok, el 16 de abril de 1960 y volvió a vencerlo el 22 de septiembre de ese mismo año, en Los Angeles.
Originario de Rodeo del Medio, Pascual Pérez completó un récord de 92 peleas, de las cuales ganó 84 y de ellas 57 antes del límite.
Falleció el 22 de enero de 1977 y dejó la aureola del crack que fue: comparte con Jimmy Wilde y Miguel Canto el podio de los más portentosos peleadores de 50 kilos y fracción.