Humberto Grondona defendió a su fallecido padre Julio Grondona ante las acusaciones en la Justicia de Estados Unidos de que recibió sobornos por 15 millones de dólares por la televisación de los mundiales de fútbol, en el marco del escándalo de corrupción conocido como FIFAgate.
La denuncia fue hecha por el ex CEO de la empresa Torneos y Competencias Alejandro Burzaco ante el fiscal del caso FIFAgate, Samuel Nitze, en los tribunales de Nueva York.
El empresario argentino declaró que acordó junto a dos cadenas de televisión pagarle a Grondona, entonces poderoso jefe de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y número dos de la FIFA, un soborno de 15 millones de dólares por los derechos televisivos de los mundiales 2026 y 2030. El pago fue hecho a través del banco suizo Julius Baer. Grondona, quien dirigió durante 35 años la AFA, falleció el 30 de julio de 2014.
Humberto Grondona, uno de los hijos del ex dirigente de la AFA y actual entrenador de Arsenal de Sarandí, club fundado por su padre, negó la acusación. "Burzaco mintió. Fue muy grave. Lo que dijo de los derechos de los Mundiales 2026 y 2030 es una locura, si papá ya había muerto", dijo el técnico del club Arsenal en declaraciones a la radio AM1550.
"Es una gran mentira porque los derechos de televisación se emitieron hasta las Copas del Mundo 2018 y 2022", agregó.
Burzacó declaró ante la Justicia que pagó varias veces sobornos al ex número dos de la FIFA.
Grondona había acordado coimas por la Copa Libertadores y la Sudamericana, y tres ediciones de la Copa América -2015, 2019 y 2023- y la Copa América Centenario, declaró el empresario según "La Nación". Grondona cobró tres millones de dólares por el torneo de 2015, y tres millones más "por una única vez" al firmar un contrato con Datisa, el joint venture de Torneos, Full Play y Traffic por los derechos de la Copa Centenario y las dos competencias siguientes del torneo.
Los sobornos acordados a través de Datisa a los jerarcas del fútbol sudamericano por la Copa América llegaron a 81 millones de dólares, según las cifras que dio Burzaco, quien no especificó cuánto de ese monto llegó a pagarse.
El empresario también reveló el pago de sobornos a dos ex funcionarios del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), uno de los cuales murió el lunes por la noche, pocas horas después de esa declaración, atropellado por un tren, en un caso que la justicia argentina caratuló como "suicidio".
Ambos estaban vinculados al programa estatal Fútbol para Todos, que entre 2009 y 2017 administró con fondos públicos los derechos de televisación del fútbol argentino.
Burzaco es uno de los 42 acusados en el escándalo por corrupción en el fútbol sudamericano que salpicó a la FIFA y decidió colaborar con la investigación en Estados Unidos.
Se encuentra en libertad domiciliaria en Nueva York después de pagar 20 millones de dólares de fianza y haber admitido que había pagado "decenas de millones de dólares" en sobornos.
Por lo menos una docena de dirigentes de diferentes nacionalidades y en distintas partes del mundo fueron hallados culpables de delitos de corrupción vinculados al fútbol desde que la Justicia de Estados Unidos abrió la investigación judicial.
Burzaco develó entre martes y miércoles en su declaración una trama de pagos de sobornos a directivos de fútbol en el marco del llamado FIFAgate. Lo hizo como testigo de un juicio a tres ex directivos de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol): el peruano Manuel Burga, el brasileño Jose Maria Marin y el paraguayo Juan Ángel Napout.