El martes pasado fue un día récord en los bancos de retiro de depósitos en dólares, que alcanzaron los u$s 522 millones, una cifra jamás vista en los últimos diez años. Hay que remontarse hasta el 12 de marzo de 2014 para ver otra jornada donde en un solo día se hayan ido más de u$s 500 millones, aunque ahí los u$s 503 millones de retiros fueron menos que ahora.
Hasta las PASO, los depósitos privados en moneda extranjera venían creciendo día a día, y habían llegado a un récord de u$s 32.582 millones el miércoles pasado (última cifra del BCRA), lo que representó u$s 1.166 millones más que los u$s 31.416 millones que había el 14 de julio pasado, lo que a su vez representó u$s 791 millones más que los u$s 30.625 millones que había el 14 de junio pasado, por lo que en los últimos dos meses los depósitos en dólares habían crecido casi u$s 2.000 millones.
Pero ya desde el viernes previo a las PASO, los bancos se prepararon para un eventual retiro de depósitos e importaron desde Estados Unidos u$s 1.000 millones para tener el físico para darle a los ahorristas que potencialmente fueran a retirarlos. El martes hubo un refuerzo: llegaron tres aviones más con una carga de u$s 120 millones en cada uno, y el viernes entraron otros u$s 120 millones provenientes de la Reserva Federal y del Bank of America.
"Hoy, a diferencia de la convertibilidad, los bancos tienen los dólares con qué responder a los depositantes que se quieran llevar los billetes a las cajas de seguridad. La mitad de esos depósitos están guardados como encajes en el Banco Central, mientras que la otra mitad están prestados a empresas exportadoras, que cobran sus ventas en dólares y una devaluación no sólo no las perjudica,sino que mejora su capacidad de repago", analiza Amílcar Collante, economista de Cesur.
Cuando Mauricio Macri asumió la presidencia, había sólo u$s 8.900 millones en el sistema. Los depósitos en dólares habían caído casi a la mitad desde los más de u$s 15.000 millones que había antes de que Cristina Kirchner aplicara el cepo en 2012. "Sin embargo, pese a esa fuerte salida de dólares billetes del sistema, ningún banco tuvo dificultades para devolverlos dólares a los depositantes", destaca Collante, quien considera que la estabilización del dólar es fundamental para detener esta salida de depósitos.