El gigante chino de las telecomunicaciones Huawei, amenazado con perder su acceso a Android debido a las sanciones estadounidenses, presentó un nuevo sistema de explotación que debe equipar sus teléfonos móviles y "aportar más armonía al mundo".
El sistema, denominado "HarmonyOS", fue presentado por el director ejecutivo de la división de consumo, Richard Yu, en una rueda de prensa en la ciudad de Dongguan (sur de China). Equipará los diferentes dispositivos de la marca dentro de un mismo "ecosistema".
"Queremos aportar más armonía al mundo", comentó, cuando Huawei figura en una lista negra de Estados Unidos, que le acusa de supuesto espionaje para el gobierno chino.
Huawei, segundo fabricante mundial de móviles, se vio atrapado en mayo en la guerra comercial y tecnológica entre Estados Unidos y China.
Considerado líder de la tecnología 5G, Huawei fue incluido en una lista negra de la administración Trump por sospechas de servir como canal para el espionaje chino, acusación que el grupo niega.
En consecuencia, las empresas estadounidenses ya no están autorizadas, en teoría, a venderle productos tecnológicos. Pero las autoridades estadounidenses decidieron postergar tres meses la entrada en vigor de las sanciones, prórroga que vence la semana que viene.
Esta prohibición afecta igualmente a Google y al suministro de su sistema operativo Android, que equipa la inmensa mayoría de los teléfonos móviles en el mundo, incluidos los de Huawei.
El grupo siempre ha dicho públicamente querer reemplazar Android en sus teléfonos por un sistema de explotación propio, pero afirma haberse visto obligado por las sanciones estadounidenses.
"Si no podemos utilizarlo más, podremos pasar todas nuestras aplicaciones a HarmonyOS", declaró Richard Yu.
"Podríamos hacerlo inmediatamente, pero nuestra prioridad es aún la de seguir utilizando el ecosistema Android", aseguró el dirigente, que calificó a Google de "muy buena empresa".
Poner en marcha un sistema operativo con todo el ecosistema que lo acompaña y conseguir convencer a usuarios y programadores es una ardua tarea.
Además de Android, de Google, el único sistema operativo suficientemente extendido es el iOS de Apple, disponible únicamente en los iPhone.
La empresa de Shenzhen trabaja desde 2012 en su propio sistema de explotación, inicialmente pensado para el internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés).
HarmonyOS "es completamente diferente de Android y de iOS", afirmó Yu. Google también está trabajando en un sistema de explotación polivalente, "pero todavía no está en la fase de realización", observó.
Los especialistas en tecnología consideran sin embargo que la tarea de Huawei apenas ha empezado.
"Hay muchas grandes promesas, pero será un desafío todavía mayor construir un ecosistema de aplicaciones capaces de rivalizar con Android", escribió The Verge, una web estadounidense que sigue la actualidad tecnológica.
Pero sin el acceso a la versión completa de Android, a los populares servicios de Google y a las múltiples aplicaciones disponibles en la tienda Google Play, Huawei podría tenerlo muy difícil a la hora de captar consumidores fuera de China.
Yu precisó que HarmonyOS se instalará en las pantallas inteligentes que el grupo empezará a vender a finales de año. Luego lo incorporarán a los otros dispositivos (relojes inteligentes, altavoces inteligentes, sistemas para automóviles...) en China en primer lugar, y más adelante en el resto del mundo.
Richard Yu respondió con evasivas cuando se le preguntó por el calendario de despliegue del sistema en los teléfonos.
"No está todavía a la orden del día", aseguró y explicó que la decisión dependerá de la evolución de las sanciones estadounidenses.
El sistema estará abierto a todos en forma de "open source". "Queremos construir un sistema operativo global que no sea utilizado únicamente por Huawei", declaró Yu.
Mientras, Huawei sigue metido en el discurso abierto entre China y Estados Unidos.
China denunció el jueves las reglas que anunció la víspera Estados Unidos para vetar al grupo y a otras empresas chinas en los mercados estadounidenses, acusando a Washington de "abuso de poder".
Huawei fue fundado en los años 1980 por un exingeniero del ejército chino, Ren Zhengfei. La hija de este último, Meng Wanzhou, fue detenida el año pasado en Canadá a petición de Estados Unidos, que la acusaba de haber violado un embargo contra Irán cuando era directora financiera de Huawei.
Meng continúa en Canadá a la espera de una decisión sobre su extradición.
Sin esos "elementos externos", Huawei podría haberse convertido desde principios de este año el primer fabricante mundial de celulares, estimó Yu.
El grupo ocupa la segunda posición, por delante de Apple pero por detrás del surcoreano Samsung.