Bodegueros y viñateros anticipan una cosecha récord para este año. Creen que se podría superar en un 10 % los casi 26 millones de quintales que se cosecharon en 2017. Trae aparejado una consecuencia negativa para el sector, ya que implica una caída del precio del vino y una baja en lo que se le paga al trabajador en la viña.
Desde el sector piden una baja impositiva y medidas que ayuden a quitar el sobrestock vía exportaciones.