Este viernes a las 9 se escucharán los alegatos finales del Ministerio Público Fiscal (MPF) y de la defensa en el juicio que se sigue contra Julio Mendoza (33), acusado de asesinar a la empresaria Ivana Milio (46) en San Martín. Tras las instrucciones finales del juez al jurado, éste último pasará a deliberar para luego regresar con un veredicto final.
Ayer terminó la etapa de pruebas con la recolección de todas las testimoniales que habían sido presentadas en la etapa de instrucción y hoy se conocerá la decisión que tome el jurado
El Ministerio Público Fiscal solicitará la pena máxima y para ello debe contar con la decisión unánime del jurado. En caso de que así lo decida, el acusado recibirá la pena de prisión perpetua por homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género.
Sin embargo, también cabe la posibilidad de que alguno de los integrantes del tribunal popular vote en disidencia, lo que obligaría a rehacer todo el proceso con nuevo juez y jurado. Si en una segunda instancia no lograran opinión unánime, Mendoza resultaría absuelto.
Una fuente judicial señaló que la carga probatoria de este caso es muy grande y que por ello el tiempo que se tomará el jurado para deliberar sería breve dado que el MPF logró probar la convivencia, restando ahora demostrar la violencia de género y culpabilidad de Mendoza.
Los hijos de Ivana dicen confiar en la Justicia y aseguran que encontrarán la tranquilidad que necesitan para cerrar esta etapa de sus vidas cuando el imputado reciba prisión perpetua. "Confío mucho en el trabajo de los fiscales y del jurado. Creo que están los detalles más que claros: las huellas, los rastros, el auto, todo. Un juicio justo sería que al imputado se lo declare culpable con perpetua, no hay otra", remarcó Lucas Carrizo, el mayor de los hijos de la empresaria.
Al mismo tiempo su hija Renata señaló estar "confiada en la Justicia casi en un cien por cien" pero no dejó de recordar a su mamá. "Extraño estar con ella, estar tranquila; ya teníamos la vida organizada. Extraño cuando llegaba a casa y compartíamos el almuerzo, nos quedábamos en la siesta juntas, extraño las cosas cotidianas", dijo con los ojos llenos de lágrimas la jovencita que aún no encuentra explicación a todo lo que pasó.
Cristian Milio, hermano de Ivana, fue más duro cuando habló del pesar de la familia. "El dolor no lo curan con nada y lo digo como hermano; imaginate cómo está mi mamá. No sale a la calle. Estos días se está enterando de las cosas terribles por las que pasó su hija. Sus hermanas la están acompañando en este duro proceso porque, como madre, no soporta estar en el juicio. Queremos que la bestia termine su vejez en la cárcel, como corresponde, si así se demuestra, porque seguramente no hay dudas de que es el asesino".
Los testigos complican al acusado
Fueron diez los testigos citados y entre ellos se encontraban dos vecinos, una amiga, dos primos de Ivana Milio y la ex esposa de Julio Mendoza, como así también su hermana, cuñado y una amiga. Asimismo se dio lectura a la declaración efectuada con anterioridad por el ex jefe del acusado dado que no pudo asistir por razones de salud.
En su declaración, la ex exposa de Julio Mendoza dijo que estuvieron casados y de esa unión nació una hija pero que luego se separaron porque él tenía problemas cuando consumía alcohol. "Se alteraba, quería discutir. Me trataba mal cuando tomaba. Las discusiones se producían en esas situaciones, me decía 'callate, vos no sabes nada, ¿qué te hacés?', todo delante de la gente por lo que optaba por callarme para que la gente no escuchara", relató la mujer.
La testigo señaló que tenían amigos en común pero con el tiempo “se fue quedando solo”, debido al mismo problema. Y agregó que cuando pasaban estos episodios con el alcohol “él inventaba historias y mentía”, lo que generó discusiones entre ambos que terminaron con la pareja.
Por su parte, primos de Ivana aportaron datos de unas vacaciones que compartieron en San Juan y que terminaron abruptamente tras una discusión de la pareja. "Estábamos tomando fernet cuando Julio e Ivana comenzaron a discutir, se dijeron cosas muy fuertes. Se sacaban en cara situaciones del pasado por lo que ella (por Ivana) decidió volver sola a San Martín", relataron.
Laura, hermana de Mendoza, también declaró y dijo que siempre tuvo buena relación con Julio. Describió los detalles y la forma en que se enteró de lo sucedido el día del crimen y la búsqueda desesperada de su hermano porque "no aparecía por ningún lado y no sabía si estaba vivo o muerto".
La mujer contó sobre una diferencia que surgió entre ellos cuando su hermano se opuso a la relación con su actual novio. Por ello, cuando le tocó declarar al joven, el MPF pidió que se mostrara al jurado un intercambio de mensajes por Messenger donde el novio de Laura lo trataba de "pollerudo y mantenido".
A su turno, una testigo aportada por la defensa, amiga del acusado, quien dijo haber padecido violencia de género y con la que compartía charlas, caminatas y paseos, definió a Mendoza como una “persona pacífica, que estaba anímicamente mal, bajo una situación complicada”. “Esta señora lo tenía amenazado que iba a matar a la hija porque tenía los recursos para hacerlo”, declaró.
En tanto una amiga de la mujer asesinada reveló sus diálogos con ella y detalló momentos compartidos. Dijo haber escuchado el relato de Milio sobre la forma en que se conoció la pareja, la evolución de la relación y cuando la empresaria se quejaba por los continuos "berrinches de Julio" por los cuales debían abandonar los lugares a los que iban. Asimismo declaró haber visto moretones en las piernas una vez que la vio caminar con dificultad, ante lo que le habría propuesto hacer exposición policial, a lo que Ivana sólo habría contestado llorando: "Yo lo amo".
Mario, un vecino de Ivana fue el último en declarar y aseguró que el día 28 de octubre (cuando la empresaria fue hallada muerta) él y su familia llegaron a su domicilio alrededor de las 17. Allí vieron salir en el auto y casa de Ivana a Julio Mendoza. Posteriormente señaló que, aproximadamente a las 19, vio a la empresaria asomarse por el portón. Este testimonio fue propuesto por la defensa y seguramente será tomado en los alegatos finales por el doctor De Oro como una de las pruebas para refutar al MPF.
La defensa
Facundo De Oro, defensor de Julio Mendoza, dijo que terminada la etapa de pruebas los testimonios fueron de testigos que aportaron elementos trascendentes para las partes porque "llegan a un punto que favorecen la situación procesal de mi defendido. La prueba aportada es suficiente para generar un estado de duda". Es el lugar donde apunta el abogado para lograr que al menos uno de los miembros del jurado vote en disidencia, situación que favorecería al imputado.
En este contexto dijo: "Apelo a la responsabilidad y buen criterio que tenga el jurado para resolver esto y se haga justicia de acuerdo a su decisión".
Consultado sobre el estado de ánimo de Julio Mendoza, su defensor señaló que "siempre que una persona está en un proceso y siendo juzgada está en estado de nervios y más sabiendo que al otro día (por hoy) va a tener una resolución que hace a sus intereses. Esto significa su libertad o su condena, por ello la situación es estresante".
También dijo que los padres del acusado no han asistido al proceso por pedido expreso de su hijo, dado que son personas grandes, con problemas de salud y “no tienen que pasar por esto, que es estresante y que les puede llegar a provocar un empeoramiento de cuadros que sé positivamente que tienen”.
Por último, De Oro aseguró que Julio Mendoza no hará uso del derecho que le asiste de declarar antes de la lectura de los alegatos finales que se conocerán hoy.