En Rivadavia, el hospital Saporiti tiene como parte de su plantel de profesionales, a cinco médicos pediatras que se reparten las tareas de las 17 camas de Internación y los Consultorios Externos, pero no existe en ese nosocomio del este mendocino, una Guardia pediátrica durante las 24 horas, pese a que el lugar atiende a más de un centenar de niños por día.
El Saporiti necesita con urgencia sumar nuevos pediatras ya que dos de los especialistas se jubilan este año, asunto que agravará aún más el panorama; para conseguirlos, los directivos han apelado a diversas vías incluso, a publicar avisos en los diarios, pero no logran tentar a los médicos con la oferta: "El problema es que mientras más alejado estás del Gran Mendoza, menor es la paga en el sistema de salud pública, un problema que viene desde hace años; la región no es ajena y un pediatra del Perrupato cobra posiblemente un 25% más de sueldo que uno del Saporiti", explica Manuel Liberal, director del hospital.
"Si ocurre algo durante el día no es tanto problema porque hay médicos, pero si el nene se te enferma en la noche, no hay un pediatra en todo Rivadavia", dice Marta, que llegó a la Guardia del Saporiti cerca del mediodía, por un cuadro de alergia en su hijo de seis años.
Manuel Liberal confirma lo que denuncia la mamá: "Es cierto, no hay Guardia pediátrica en el hospital ni tampoco en el sector privado" y en ese contexto, un niño que llega al Saporiti por la noche será revisado por el médico clínico de guardia, quien posiblemente optará por bajar la fiebre del menor y pedirle a la mamá que vuelvan de día.
Rivadavia tiene una población de 60.000 habitantes de los cuales, 35.000 viven en la ciudad y barrios aledaños. Ante un problema de salud, muchos vecinos ven en el hospital la primera opción, a tal punto que en los últimos años la cantidad de pacientes que ingresa por la Guardia es mayor a la que concurre a Consultorios Externos. Efectivamente, en 2003 solo el 41% de los pacientes del Saporiti ingresaba por Guardia, pero este año la cifra asciende al 61%.
"El porcentaje se invirtió y hoy es mucho mayor la cantidad de gente en la Guardia y de ese total, más de la mitad son niños", explica Abel José, gerente Asistencial del hospital.
Jaqueado por este problema, desde febrero, el Saporiti busca contratar pediatras y lo ha intentado por diversos medios, incluso entrevistas telefónicas y avisos en los diarios, pero nada ha dado resultado y los médicos del área no se han mostrado atraídos por la oferta.
Por eso, el hospital prepara dos proyectos con los que espera revertir la situación, pero que requieren aprobación del Ministerio de Salud.
El primero es una solución de fondo y crea una Guardia pediátrica de 24 horas en el Saporiti, integrada por siete especialistas, uno por cada día de la semana; el segundo, abre la residencia pediátrica, un área con la que el hospital no cuenta y que brindaría nuevos médicos en esa rama.
Para tentar a los especialistas, la idea del Saporiti es ofrecer convenios por unos $20.000 al mes, cifra base similar a la del Perrupato pero para ello, necesita unos $2,4 millones extras al año, asunto que debe ser aprobado por la Provincia.
"Este hospital tiene un presupuesto de $101 millones, al que habría que sumar el dinero para los dos proyectos. Vamos a entrevistarnos con el Ministerio en estos días y creemos que vamos a conseguirlo, porque la falta de pediatras es grave para Rivadavia", cierra Liberal.