Una maestra jardinera fue degollada ayer por su ex marido frente a sus alumnos en la sala de una guardería de la ciudad cordobesa de San Francisco, tras lo cual el atacante, un reconocido empresario local, quedó detenido.
Fuentes policiales señalaron que el ex marido tiene problemas psiquiátricos e incluso antes del ataque había estado recluido en una institución de salud mental.
La víctima fue identificada como María Eugenia Lanzetti, de 44 años, quien había logrado ante la justicia la exclusión del hogar de su concubino por antecedentes de violencia directa.
La docente fue asesinada frente a los niños de entre 3 a 4 años poco antes de las 11 en la guardería “Estrellitas traviesas”, en el centro comunitario del barrio Jardín de la ciudad de San Francisco.
Las fuentes destacaron que tras el ataque el ex esposo de la víctima, Mauro Bongiovanni, fue detenido por el crimen y quedó a disposición de la justicia. El hombre, de 45 años, logró según los informes salir de una clínica psiquiátrica donde estaba alojado bajo tratamiento para cometer el femicidio.
Además, señalaron que la mujer había radicado denuncias por violencia familiar e incluso tenía asignado un “botón antipánico”, dispositivo que alerta a las fuerzas de seguridad sobre situaciones de peligro para personas en situación de riesgo.
Según testigos, el hombre se abalanzó sobre su víctima delante de los niños de la guardería y la atacó con un cuchillo en el cuello, lo que provocó su muerte por desangramiento.
El cuerpo de la mujer fue trasladado a la Morgue Judicial, donde era sometida a la autopsia que ordenó la justicia.
El ministerio de Desarrollo Social de la provincia confirmó que Lanzetti tenía en su poder un botón antipánico desde setiembre de 2014, debido a las denuncias reiteradas contra su ex marido, pero al parecer ayer no alcanzó a presionarlo. La maestra jardinera era madre de dos hijos de 17 y 21 años.
El caso quedó a cargo del fiscal Bernardo Alberione, quien dispuso mantener al atacante bajo detención hasta que las pericias indiquen si está en condiciones de ser imputado y responder por sus actos.
El hombre detenido, según la prensa de San Francisco, era responsable de una fábrica de conservadoras termoplásticas y cajas de pesca conocida en esa ciudad.