Los homosexuales viven con "miedo constante" por los "niveles intolerables" de violencia en su contra en Jamaica, donde son frecuentes víctimas de hostigamiento, discriminación y maltrato físico, denunció el martes Human Rights Watch (HRW).
Las autoridades de la isla caribeña deben revocar leyes anticuadas que prohíben la conducta homosexual y tomar medidas para proteger a lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT), señaló la organización estadounidense de defensa de los derechos humanos.
"Los LGBT en Jamaica son vulnerables a la violencia física y sexual y viven en miedo constante", señaló HRW en un informe de 86 páginas divulgado este martes, producto de una investigación en la isla durante cinco semanas entre abril y junio del año pasado.
Los homosexuales, "especialmente los que son pobres y no pueden vivir en áreas más seguras, son particularmente vulnerables", en un país de por sí con altos niveles de violencia, desconfianza de la población en la policía y alta impunidad, señaló la organización.
"La comunidad LGBT en Jamaica enfrenta niveles intolerables de violencia y no puede confiar en la policía", indicó Graeme Reid, director de derechos homosexuales de HRW. "Las autoridades, desde el primer ministro para abajo, debe poner fin a la violencia y la discriminación, procesar a los responsables y proscribir las leyes homofóbicas", dijo.
De 56 casos de violencia relacionados con la identidad sexual documentados por HRW en el informe, sólo 19 víctimas hicieron la denuncia, la policía tomó declaración formal únicamente a 8 de ellas y apenas en 4 oportunidades hubo arrestos.
Devon O. (seudónimo para proteger a la persona), por ejemplo, afirmó que en enero de 2013 la policía no intervino mientras era golpeado por una turba durante 20 minutos. Cuando por fin los agentes lo retiraron del lugar, lo esposaron y a su vez le dieron golpes.
Además de las agresiones físicas, HRW encontró discriminación de instituciones del gobierno, propietarios que rechazan alquilar viviendas a LGBT o médicos que les niegan cuidados.
La primer ministro de Jamaica, Portia Simpson Miller, debe cumplir con su promesa de acabar con la discriminación y las autoridades deben verificar el cumplimiento de nuevas directivas policiales a favor de la diversidad, pidió HRW.