Luisana Lopilato tuvo que volver a empezar para poder encontrar trabajo en Hollywood. Un lugar donde ni su nombre ni su marido pesaron demasiado. Ella soportó casting tras casting hasta poder ser aceptada. Fueron cuatro años de rechazos seguidos.
"Acá [por Los Angeles] empecé muy de abajo, haciendo castings y rebotando durante cuatro años. Yo le decía llorando a Mike que iba a tirar la toalla, que iba a trabajar por las temporadas que viniera a la Argentina, pero que no iba a buscar más, y me equivoqué", le dijo a Catalina Dlugi en La Once Diez/Radio de la Ciudad.
Y remarcó: "Era doloroso pintarme, arreglarme, prepararme, repasar, ir a hacer un casting y que me digan que no (...) seguir insistiendo fue la mejor decisión, tuve que bajar el ego y empezar de cero, porque sino me tenía que quedar en casa".
"Nunca creí que iba a poder actuar en Estados Unidos por mi acento, por mi mala pronunciación", confesó ella. La oportunidad le llegó ahora. Hizo una audición vía Skype con el director de un filme y lo logró.
Apenas la aceptaron partió a Nueva York. "Mike me banca en todas las locuras y tengo una chica que me ayuda con mi hijo Noah, así que cerré todo en Vancouver y arrancamos enseguida para Nueva York", dijo ella feliz.
Ahora Lu será Kendall, una agente inmobiliaria. "Mi personaje es una chica latina que vive en Miami hace mucho tiempo, eso justifica mi acento, pero me ayudan a hacer bien las pronunciaciones", aclaró.
Otro detalle, luego de este filme vendrá otro más. ¡Bravo!
