Ariel Holan metió palo y a la bolsa. Dejó de dirigir equipos de hockey sobre césped para saltar al fútbol con la ilusión de ser DT de su amado Independiente: ganar la Copa Sudamericana con los rojos es ahora acariciar el cielo con las manos.
Lo hizo a los 57 años, casi medio siglo después de acompañar a su padre como hincha en las tribunas. En el Maracaná de Rio de Janeiro se dio el gusto. El Rey de Copas recuperó protagonismo en el orden internacional.
"¡Esto es muy grande! Hacerlo en este estadio mítico, uno de los más grandes de la historia mundial (...) Independiente lo hace por tercera vez", dijo Holan en medio de lágrimas.
Nacido en Lomas de Zamora (sur del conurabano bonaerense) el 14 de septiembre de 1960, Holan recorrió un camino inusual para llegar a la conducción de los Diablos Rojos. Es el club del que confesó ser hincha desde que era pequeño.
Cuando avanzó a la final de la Copa tras eliminar a Libertad de Paraguay se emocionó hasta las lágrimas al recordar a su padre, con el que iba a las tribunas.
Desde que llegó había llamado la atención con sus 14 colaboradores y la utilización de drones para registrar los movimientos de los jugadores durante los entrenamientos.
"Teníamos que implementar un juego aguerrido en lo defensivo y dinámico en la ofensiva. Hay un buen plantel, y podíamos dar un salto de calidad con las incorporaciones", había aclarado. Pero enseguida advirtió: "No soy un mago ni un mesías".
Al principio los hinchas lo miraban de reojo. Había abrazado el hockey desde jovencito. Estuvo en los clubes Lomas de Zamora y San Martín, pero su ciclo como jugador terminó a los 19 años, poco después del fallecimiento de su padre.
Impulsado por Luis Ciancia, un entrenador fundamental para el desarrollo del hockey sobre césped en Argentina desde finales del siglo pasado, Holan se convirtió en un director técnico metódico y apasionado, y se ganó un creciente reconocimiento como campeón metropolitano y argentino.
"Aprendí mucho con el hockey para aplicar al fútbol", ha declarado.
Incluso, tuvo una oportunidad para dirigir al equipo femenino de Uruguay en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo-2003, y allí condujo a las charrúas a la obtención de una histórica medalla de bronce.
- De la bocha a la pelota -
El preparador físico Ariel Kohan lo invitó a cambiar de deporte y Holan comenzó a trabajar como integrante del cuerpo técnico de Jorge Burruchaga en Arsenal de Sarandí, y más tarde, en Estudiantes de La Plata.
Entre 2006 y 2008 trabajó como director de la escuela de fútbol de Independiente, para lo cual formó un plan de detección de talentos. Luego volvió a ser ayudante de campo de Burruchaga en Banfield y en Arsenal, y sumarse después como asistente de Matías Almeyda durante el ciclo en el que River estuvo en segunda división (2011/2012).
Tras varios años como asistente, en junio de 2015, fue DT en primera división de Defensa y Justicia. Consiguió un histórico octavo puesto en el torneo de primera división-2016 y la clasificación del modesto Halcón de Florencio Varela a la Copa Sudamericana-2017.
Casi de inmediato, en diciembre de 2016, le llegó la gran ocasión de desembarcar en Independiente, con el apoyo del presidente Hugo Moyano.
En la Copa Sudamericana, Independiente empezó en abril su campaña en la Copa Sudamericana, donde superó a Alianza Lima (Perú), Deportes Iquique (Chile), Atlético Tucumán (Argentina) y los paraguayos Nacional y Libertad, antes de la final contra Flamengo, en la que se impuso para volver a celebrar un título internacional después de siete años de sequía.