La temporada 2003-04 marcó el debut como director técnico de Walter Daniel Oldrá. El “Gato” había colgado los botines un año antes (en abril de 2002) y su incursión como entrenador era toda una incógnita para el ambiente futbolero.
Las crónicas de Los Andes de la época afirmaban que en las primeras prácticas se había podido apreciar a un técnico metódico y que practicaba todo 10 veces si era necesario.
Fiel a su filosofía, armó un plantel joven con muchos juveniles de la cantera del club, a los que se sumaron tres incipientes valores de la Asociación Atlética Luján de Cuyo, que en la temporada anterior había estado a un paso de ascender a la Primera B Nacional: Leandro Garciarena, Lucas Martínez y Osvaldo Miranda.
Don Gato y su Pandilla debutaron con una estupenda victoria (1-0) ante Ferro Carril Oeste en Caballito con un tanto de Hernán Cabrera y se mantuvo invicto hasta la cuarta fecha (cayó 2-1 ante Tiro Federal de Rosario en el Feliciano Gambarte).
Su equipo completó un torneo Apertura irregular. Alternó algunas buenas con varias malas y finalizó undécimo.
Para el Clausura, Oldrá pidió poco, pero de calidad. Para potenciar un plantel sin figuras rutilantes y con muchos juveniles, llegaron tres jugadores de experiencia en la divisional y en Primera División: Daniel Giménez, Gastón Martina y Hernán Maisterra, quienes armaron un equipo importante junto a Leonardo Torres, Luciano Nicotra, los más experimentados del plantel. Diego Pozo, el Hormiga De la Vega, Osvaldo Barsottini, Huertas, el Gallo Duarte, Vezzani y el Flaco Miranda ya tenían su lugar desde el campeonato anterior.
El Tomba comenzó el Clausura con un 3-1 convincente ante Ferro, pero luego de caer ante Defensores de Belgrano y de igualar con Defensa y Justicia, el Gato Oldrá -cuestionado por algunos sectores- dejó la dirección técnica del equipo.
En su lugar asumió la dupla Cosme Zaccanti-Luis Sosa, quienes no sólo encontraron al equipo, sino que lo metieron en el repechaje por un lugar en la Promoción para ascender a Primera División.
El rival fue Argentinos. En la ida, en el Gambarte, el Tomba se impuso 1-0 con un gol de Leonardo Torres.
Pero en la revancha, cayó 2-0 en el estadio de La Paternal y la ilusión del pueblo tombino se esfumó como arena entre los dedos. Igual, un par de temporadas después tendría su merecida revancha. Continuará…