Dos días después de la madrugada de Zonda que sacudió a la provincia, historias de pérdidas siguen saliendo a la luz. Lamentablemente, son muchos los mendocinos que perdieron sus casas y sus animales, sobre todo aquellos que viven en las villas de montaña.
Otros, en tanto, aun no pueden regresar porque sus vuelos debieron ser aplazados y las aerolíneas no pudieron asignarles asientos en estos días. Es el caso de Mariana Baizan, quien tenía pasaje de regreso el pasado domingo a la provincia pero que recién lo hará el próximo miércoles.
Los restos del incendio
Andy Elías, reconocido vecino de Las Vegas, comentó que participó activamente la noche de los incendios en esta localidad cordillerana. Según su experiencia, el incendio probablemente se inició por un asado o por las cenizas de alguna salamandra ya que durante los fines de semana largos o fechas especiales es habitual que el fuego se inicie por esta razón.
"Hay un 80% de probabilidades de que haya sido por negligencia humana. Siempre que vienen muchos turistas se producen este tipo de incidentes. Tiran las cenizas en un baldío y después hay problemas. Y además esto se agravó con el Zonda", detalló.
Respecto de lo vivido la madrugada del domingo aseguró que se vivieron momentos de verdadera angustia. "Fue desesperante. Porque el fuego avanzaba mucho y no podías hacer nada. Muchos entraron en un estado de inconsciencia que les hacía poner en riesgo sus vidas. A veces querés salvar tu casa y no te das cuenta que las llamas te rodean. Tuve que rescatar a muchos vecinos, porque tenés que priorizar la vida de las personas", aseguró Elías quien detalló que tuvo que recibir atención oftalmológica por el daño en sus ojos. Describió que muchos de sus vecinos perdieron animales y que otros no tienen cómo alimentarlos, ya que la pastura se quemó. "Por ahora los sobrevivientes están en casas de vecinos aguardando a ver qué pasa con la reconstrucción de sus viviendas", dijo.
Testigo
Beatriz es la mamá de Emilia Roldán, una pobladora de Potrerillos que perdió su casa y sus animales con el incendio. Según contó Beatriz, su hija y su pareja escaparon de milagro del incendio, ya que se encontraban en el medio del campo tratando de salvar a sus animales.
“Sigue en estado de shock, lo perdieron todo. Su casa, sus dos caballos, sus cinco perros y los dos gatos. Todo. Por suerte han empezado a llegar muchas donaciones pero les sigue faltando material para la construcción, porque quiere volver a vivir en su casa”, dijo la mujer agregando que por ahora su hija se queda en la casa materna.
Son 60 las familias afectadas que perdieron sus viviendas y que se están quedando en casas de amigos, en el Centro Integrador Comunitario y en hospedajes para turistas mientras resuelven lo que ocurre con sus propios hogares. "Están en la calle y necesitan quedarse cerca porque allí tienen sus trabajos", destacó Beatriz. Del incendio opinó que no fue intencional, al menos en la zona de Las Vegas. "Mi hija vio todo. Ellos sintieron que se voló una chapa de su techo y cuando salieron a ver vieron las chispas de los postes. Acá alguien, con vientos de 120 kilómetros, debería haber cortado la luz. No lo hizo porque estaba lleno de turistas. Y esto no fue una tragedia de casualidad, pero si hay un Zonda en una semana se repite todo", comentó enojada. Agradeció toda la ayuda recibida."Pero estamos abandonados, hubo mucha falta de responsabilidad y controles".
Varada
"Sobrevendieron mi vuelo. Pero ese día se dieron varios factores. El Zonda, el temporal en Buenos Aires (desde donde espera regresar), y además se reprogramaron varios vuelos. La situación acá en Aeroparque fue un desastre. Hubo un caos que se agravó por la lluvia", dijo la mendocina.
Aseguró que en su caso particular, la aerolínea le abonó una noche de hotel pero que además tiene donde alojarse hasta mañana. En cambio, muchas familias con niños quedaron varados porque las aerolíneas les dijeron que por problemas climáticos no estaban obligados a pagarles un alojamiento. "También comenzaron las vacaciones y la temporada alta en Buenos Aires, lo que complicó aún más todo. Lo peor es que en el caso de los que viajan en Low Cost tienen que quedarse en el aeropuerto hasta que les digan, describió Baizan.
