Hinchas de Independiente Rivadavia protestaron en el nudo vial de Costanera esta noche y generaron caos vehicular en el ingreso a la ciudad de Mendoza. Exigen que el clásico frente a Gimnasia y Esgrima, que por disposición de la Policía está programado para el martes a las 14, se juegue el mismo día por la noche, a las 21.
Unos 300 simpatizantes de la Lepra con carteles con la leyenda "Clásico mendocino 21 horas" se aglutinaron en el transitado cruce por el horario del clásico frente al "Lobo". Los hinchas leprosos se ubicaron del lado de Guaymallén para evitar una posible multa de parte de la Municipalidad de Capital, que había advertido al club de esta posibilidad, atentos al Código de Convivencia vigente.
Policías y Preventores de Guaymallén fueron apostados en la inmediaciones para evitar desmanes y que la situación pasara a mayores.
Los simpatizantes "azules" quemaron neumáticos y realizaron cantos en contra de su rival del próximo martes y del comisario Daniel Massola, quién le niega a Independiente Rivadavia y a sus hinchas cambiar el horario del "clásico" por seguridad.
El malestar por el caos vehícular fue completo entre los automovilistas debido a que la protesta se llevó a cabo cuando más vehículos ingresan a la ciudad de Mendoza en hora pico.