Gonzalo Higuaín se mostró distinto a lo habitual después de la victoria por 2 a 1 sobre Chile, pese a que no marcó ningún tanto y su tarea no difirió demasiado de las últimas discretas presentaciones que viene cumpliendo con la camiseta del seleccionado argentino, pero las razones de su cambio hay que buscarlas en que anoche volvió a ser titular desplazando a Sergio Agüero, algo que "quería con muchas ganas".
"Quería con muchas ganas tener esta oportunidad ya que personalmente me siento muy bien. Y más entusiasmo te da cuando ves, como en el partido de anoche, que por cada jugador de Chile había cinco de los nuestros presionándolo", confesó el `Pipita' .
"Nosotros hicimos un gran partido porque minimizamos a una gran selección como la de Chile. Los presionamos, les hicimos perder muchas pelotas y así llegaron los goles", describió el goleador récord del fútbol italiano en un solo torneo con 36 tantos convertidos en la temporada recientemente finalizada.
El delantero de Napoli reconoció que era "un partido bravo que el grupo quería ganar. Y para eso mi función era la de tocar de primera y desmarcarme rápido, porque ellos tenían la defensa muy alta y enseguida podía quedar en posición adelantada".
"Era muy importante empezar ganando, y más ante un rival como Chile, porque esos nos permitirá alcanzar mejores oportunidades en el torneo", apuntó.
"Después, también sabemos que en esta Copa América habrá más partidos como el de anoche, de ida y vuelta, en los que habrá que estar más finos para aprovechar mejor las ocasiones de gol que se nos presenten", advirtió.
Higuaín no tuvo opciones para convertir a lo largo de los 72 minutos que permaneció en cancha, justamente hasta que fue relevado por el 'Kun', pero este hecho de ser el reemplazado y no el reemplazante lo hicieron hablar sin rictus de frustración en el rostro sobre los goles ajenos.
"En el segundo tiempo (Ángel) Di María hizo el primer gol muy rápido y después los esperamos un poco, hasta que (Ever) Banega marcó el segundo cuando logramos quitarles la pelota", puntualizó.
"Pero atención que Chile es el mismo equipo de siempre, con mucha posesión y presión alta, bastante similar a nosotros. No cambió nada, salvo su entrenador", argumentó.
Después llegó el turno de hablar de sus dos compañeros que mayor atención concentraron en el imponente Levi's Stadium, un escenario de fútbol americano para recordar por su belleza arquitectónica, que abarca desde las graderías hasta el espacio para la prensa, una especie de cabina tridimensional donde se puede ver el partido de la manera más aséptica del mundo, sin que un solo ruido se filtre desde el campo o el público.
Del gran ausente, Lionel Messi, dijo que "estaba contento con lo que había hecho el equipo", y de Di María aseguró desconocer que en las últimas horas había fallecido su abuela, pero afirmó que "Dios le dio revancha al permitirle marcar un gol para ella".
Y finalmente se dedicó a mirar al futuro inmediato con entusiasmo, analizando ya lo que se vendrá el próximo viernes en Chicago, a donde la delegación argentina estaba llegando en la medianoche de este martes en la Argentina, las 22 de esta ciudad del este estadounidense.
"Panamá, nuestro próximo rival, es un equipo compacto y muy duro. Por eso no habrá que descuidarse. Es que esta es una Copa América muy pareja y todos los adversarios son difíciles", concluyó un 'Pipita' diferente, que hoy se siente titular.