El delantero Gonzalo Higuaín, que levantó su nivel a medida que avanzó el Mundial Brasil 2014, sostuvo que el seleccionado argentino tiene "unos huevos impresionantes", tras el triunfo sobre Holanda por 4-2 en la tanda de penales, luego de igualar 0-0 en los 120 minutos de juego.
"En un Mundial es muy difícil jugar bien al fútbol. La garra no tiene que faltar. Llegamos a la final de menor a mayor, en crecimiento, porque este seleccionado tiene unos huevos impresionantes. Eso lo vio todo el mundo", aseguró Higuaín.
"Es una alegría enorme, sin dudas, jugar una Copa del Mundo y llegar a la final. No se le da a cualquiera. Ojalá podamos salir campeones", agregó el jugador de Napoli de Italia de cara al partido definitorio del domingo a las 16 ante Alemania, en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Higuaín, de 26 años, contó que desde pequeño soñó con este momento. "De chiquito, cuando veía un Mundial, me imaginaga jugarlo, estar ahí, lo tenía en la cabeza, y ahora lo tengo a un paso. Es difícil mantener la calma, pero hay que hacerlo como lo hicimos hasta ahora", enfatizó.
"No todos los días se da llegar a la final de un Mundial. Es algo impagable, no tiene palabras", confesó el "Pipa", quien lleva cinco goles en once partidos mundialistas.
Además, aseguró que "esto es algo que varios persiguieron durante muchos años y a mi me tocó en mi segunda Copa del Mundo (estuvo en Sudáfrica 2010 cuando Alemania lo eliminó en los cuartos de final con un lapidario 4-0). No tuvimos un camino fácil, pero estamos en la final por mérito propio", puntualizó el futbolista surgido de las inferiores de River Plate en 2005.
Higuaín, que tuvo su mejor partido en cuartos de final contra Bélgica, donde marcó el gol del triunfo por 1-0, destacó que el seleccionado que dirige Alejandro Sabella "le demostró al mundo entero que podía llegar a la final".
"Estamos a un pasito de la gloria. Hay ánimo de levantar este trofeo. Debe ser algo inigualable, pero nos queda un partido por delante y ante un gran rival", subrayó.
Por último, Higuaín, ante la consulta de si Alemania "mete miedo" luego de golear a Brasil por 7-1 en las semifinales, expresó: "No, para nada. En todo caso hay que hacerle la misma pregunta a ellos despues de vernos jugar a nosotros ayer".
"No va a ser fácil para ninguno de los dos. Es una final y trataremos de jugarla de la mejor manera y ganarla", adelantó.
Y cerró: "Desde que llegue a Brasil me imagino levantado la Copa, es algo que soñé desde chiquito. Ahora solo falta un partido para lograr el objetivo. Y estamos listos para alcanzarlo", concluyó.
