Fue cerca de las 18 de ayer, cuando Juan José Fernández (24) dejó de existir mientras recibía atención médica en el hospital Ramón Carrillo de una profunda herida en el tórax. El agresor estaría identificado, aunque aún no pudo ser detenido.
En las calles de tierra que forman una imaginaria esquina en el interior de un conglomerado al este del Acceso Norte, fue cuando el hombre, junto con su novia, lo cruzaba y se encontró con el agresor (que habría sido pareja de la mujer), por lo que algunos testigos aseguran que ya se conocían de antes.
Y así lo que habría comenzado como una discusión verbal -por cuestión de polleras- terminó cuando la víctima recibió un puntazo en medio del pecho. Eran poco más de las 17.
En el lugar, un asentamiento conocido como barrio Junín y que se encuentra encerrado entre el callejón Barrio Nuevo y la calle que le da nombre a la zona, los vecinos aseguraron haber escuchado “gritos como de una pelea... pero nada más", dejando en claro no querer involucrarse con lo ocurrido o con los protagonistas del hecho.
Aviso a la policía
Sin embargo, fue esa misma gente la que trasladó al herido, en un vehículo particular, hasta el centro sanitario de Las Heras, donde, pese al esfuerzo de los facultativos, el joven murió mientras se encontraba en la sala de guardia y cuando sólo había pasado algo más de una hora del hecho.
Y ese fue el momento en que recién la Policía, advertida por el personal que cumple funciones en el nosocomio lasherino, tomó conocimiento del homicidio.
Desde la comisaría 36, bajo las órdenes de la Oficina Fiscal 6, una comisión se trasladó hasta el lugar en busca de pistas que permitieran dar con el agresor.
En esas circunstancias, efectivos de la Policía Científica dieron con el arma utilizada por el victimario y con algunos datos aportados por los propios vecinos se habría podido identificar al autor de la agresión, que también vive en el barrio.
Desde el Ministerio se informó que Fernández cuenta con antecedentes penales relacionados con robos y lesiones, entre otros.
