De cada 10 infectados con hepatitis C en Argentina, sólo 4 lo saben. No es un tema menor si se tiene en cuenta que se trata de una patología que no presenta síntomas y que ante la falta de tratamiento, el daño hepático avanza indefectiblemente por lo que resulta la principal causa de cirrosis, trasplante hepático y cáncer de hígado.
El dato surge de un informe de la Asociación Argentina para el Estudio de las Enfermedades del Hígado (Aaeeh), que además detalla que tienen esta “enfermedad silenciosa” 400 mil argentinos. Por ello, la entidad subraya que cuanto antes sea detectada y tratada, menor será el daño sobre el órgano afectado.
“Estamos hablando del equivalente a 4 o 5 estadios de fútbol repletos, cientos de miles de personas que no saben que tienen una enfermedad grave que va ocasionándoles daño irreversible en su hígado”, explicó Ezequiel Ridruejo, médico hepatólogo y actual presidente de la Aaeeh.
Por su parte, Carlos Espul, responsable del programa de Hepatitis Virales de la provincia, aceptó que esta realidad se da en Mendoza y que los pacientes en general llegan tarde al tratamiento.
Mencionó que acuden con 30 años de desarrollo de la enfermedad a cuestas, lo que lleva a que el paciente tenga un alto deterioro hepático. Dijo además que en 70% de los casos se produce una infección crónica mientras que el resto elimina el virus por sí solo.
Falta información
El médico consideró que hay dos motivos fundamentales por los cuales es tanta la cantidad de personas que desconocen estar infectados.
Por un lado la falta de información de la población en general sobre esta patología y sobre cuáles son las conductas de riesgo por las cuales deberían testearse para asegurarse su estado de salud. Por otro lado, la falta de conocimiento, información o formación de los médicos generalistas o de atención primaria, que son quienes en primera instancia pueden solicitar el estudio.
Espul lo señaló en referencia a que debe considerarse el historial del paciente para saber si tuvo alguna práctica por la cual pudiese haber contraído el virus, pero por otra parte mencionó que se recomienda que toda la población se haga un estudio para detectar hepatitis C una vez en su vida.
El test es sencillo y rápido: consiste en una extracción de sangre y el resultado se obtiene luego de dos horas y media, aproximadamente.
En América, 1% de la población tiene hepatitis C, según datos de la Organización Mundial de la Salud, una proporción similar a la de otros continentes pero inferior a la de Europa (1,5%).
Cómo se contagia
Espul destacó que lo primero que hay que saber es que la principal vía de contagio es por sangre y quienes están más en riesgo son los consumidores de ciertas drogas.
Puede haber contagio cuando se comparte un “canuto” al inhalar cocaína, o con el uso de material no estéril por parte de personas que utilizan drogas inyectables; también en prácticas sexuales en las que pueda producirse una herida.
Además, se puede contraer hepatitis C al compartir elementos de uso personal como afeitadoras o cepillo de dientes con alguien infectado.
También pueden implicar un riesgo instrumentos no esterilizados para la realización de tatuajes y piercings, al igual que en el caso de instrumental médico u odontológico.
Por otra parte, la madre puede transferir el virus a su bebé durante el embarazo. El titular del programa provincial señaló que también deberían hacerse el test todos aquellos que hayan recibido una transfusión de sangre antes de 1992.
Si bien las consecuencias de la ausencia de tratamiento pueden ser severas, si se lo hace el 95% de los pacientes pueden curarse, tal cual segura la Aaeeh.
El tratamiento consiste en la administración de comprimidos durante un tiempo que va entre 2 y 6 meses. En Argentina hay actualmente disponibilidad de tratamientos, sin embargo no todos acceden. Esto se debe a que las nuevas fórmulas son de un costo muy elevado pero de mayor eficacia y muy pocos efectos secundarios.
El informe de la Aaeeh señala que es fundamental poder anticiparse y curar el virus antes de que ocasione un daño irreversible, en definitiva no llegar tarde como se ha estado haciendo hasta ahora.
“Muchos países ya están tratando y curando a pacientes que no presentan todavía un compromiso severo y de esa manera tendrán mucha mejor calidad de vida y mínimos riesgos de progresión luego de la cura”, mencionó María Virginia Reggiardo, médica hepatóloga, gastroenteróloga y miembro de la Aaeeh.
Por eso, desde la entidad hacen un llamado a la realización de testeos a través de una campaña que se desarrolla en estos días en las redes sociales, con una estrategia de presencia e interacción sistemática en Facebook y Twitter, promoviendo los hashtags #DetectarParaCurar y #HaCetelTest.
Las hepatitis víricas causan tantas muertes como el VIH
En abril pasado la Organización Mundial de la Salud difundió el Informe Mundial sobre la Hepatitis, donde se sostiene que las hepatitis víricas causaron 1,34 millones de muertes en 2015, una cifra similar a la atribuible a la tuberculosis y la infección por el VIH.
Sin embargo, subraya que mientras las asociadas a estas dos últimas causas tienden a disminuir, las relacionadas a las hepatitis van en aumento.
Por otra parte, se señala que a nivel mundial en 2015 solo se diagnosticaron 9% de las infecciones por hepatitis B y 20% de aquellas con el tipo C.
Hay que tener en cuenta que existen 5 tipos: A, B, C, D y E. Sin embargo, las que reclaman mayor atención son la B y la C ya que son las que ocasionan 96% de la mortalidad mundial por esta patología.
La tipo B se transmite fundamentalmente por vía sexual pero tiene herramientas para prevenirse. Esto no sólo a través del uso del preservativo sino además porque existe una vacuna disponible en Argentina para toda la población de manera gratuita.
Hoy, 28 de julio, se celebra el Día Mundial contra esta enfermedad, en esta oportunidad bajo el lema “Eliminemos las hepatitis”. La OMS expresó su preocupación por el impacto mundial de esta infección que le cuesta muy caro al sistema de salud.
A través de la “Estrategia mundial del sector de la salud contra las hepatitis”, desde la organización se fijaron dos objetivos de aquí a 2030: someter a las pruebas de detección y tratar al 90% y el 80% de las personas infectadas por el virus tipo B o C, respectivamente.
La OMS recomienda vacunar a todos los recién nacidos
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó ayer, en vistas de la creciente epidemia de hepatitis, vacunar a todos los recién nacidos del mundo contra la hepatitis B.
El director del programa de hepatitis de la OMS, Marc Bulterys, afirmó en Ginebra que los casos de hepatitis también van en aumento en los países más ricos.
La hepatitis puede derivar en un cáncer. En 2015, de acuerdo con estimaciones de la OMS, 71 millones de personas se infectaron en todo el mundo con hepatitis C y 257 millones con hepatitis B, los dos tipos de hepatitis más significativos de los cinco que hay.
Alrededor de 1,3 millones de personas murieron debido a la hepatitis, aunque menos del diez por ciento de los infectados sabía que tenía la enfermedad.
Sin embargo, la OMS cree que se hicieron buenos avances en su objetivo de reducir para 2030 las nuevas infecciones en un 90 por ciento y el número de muertos en un 65 por ciento.
Alrededor del 70 por ciento de los enfermos de hepatitis viven en 28 países, entre ellos China, India, Sudáfrica y Brasil. El 89 por ciento de los países convirtió la lucha contra la hepatitis en una de sus prioridades, de acuerdo con la OMS.
El 30 por ciento de las infecciones se producen por el uso incorrecto de inyecciones en hospitales y clínicas o en campañas de vacunación, según difundió la organización.
DPA