El líder opositor y gobernador de Miranda, Henrique Capriles, dos veces candidato presidencial, ha reprochado al papa Francisco su distanciamiento con la crisis de Venezuela.
“Estamos en emergencia, no tenemos tiempo que perder con el diálogo”, dijo al pedir apoyo a la comunidad internacional para exigir elecciones.
-¿Aún confía en el Vaticano después de fracasar el diálogo?
-No es que confiara en el Vaticano. Pedimos que el Vaticano nos ayudara para que el gobierno entendiera y aceptara el referéndum revocatorio en el diálogo. Con el mayor respeto y afecto por el Papa Francisco y al monseñor Claudio María Celli (el enviado del Vaticano), pero ¿dónde está el Papa?
Ya estamos en marzo y aquí se mueren niños y pacientes que no consiguen medicinas. Tenemos un 17% de la población que come de la basura. Hay 10 millones de venezolanos que comen dos o una vez al día.
-¿Qué le pide a la Iglesia?
-Soy católico. Para el caso apremiante y urgente que vivimos, que no le den largas a la crisis. No tenemos tiempo que perder. Estamos en emergencia y así la tenemos que asumir.
-¿Hay diferencias entre la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) y el Vaticano?
-La Iglesia es una sola. La CEV ha sido muy clara y firme pero el Vaticano parece distante. Le pido al papa Francisco que su prioridad tiene que ser Venezuela. No digo que sea el único país que tiene problemas pero sí es el ejemplo de la inflación más alta, escasez de comida y mayor índice de criminalidad y pobreza.
-¿De qué temas hablaba con José Luis Rodríguez Zapatero (uno de los mediadores en el diálogo entre gobierno y oposición)?
-Yo le hablaba mucho de manera reiterada, una y otra vez, sobre la crisis económica y de la escasez de alimentos y medicamentos, de la necesidad de elecciones para cambiar de gobierno y de la liberación de los presos políticos.
-¿Qué resultados ha dado el diálogo que empezó hace un año?
-Ningún resultado. El diálogo ha sido una burla para los venezolanos. Y Zapatero tiene responsabilidades ahí.
-¿Qué balance hace sobre Zapatero?
-Todos los indicadores son negativos. Zapatero es el balance negativo. Estamos viviendo la peor crisis económica y social. Son 28 mil venezolanos asesinados.
-¿Ha contribuido Zapatero para atornillar a Maduro en el poder?
-Creo que Zapatero no ha aportado nada positivo. Se le ha criticado duramente. Y muchos lo ven como salvador de Maduro. El mediador debe ayudar a Venezuela y no a Maduro. Zapatero nunca creyó en el referéndum revocatorio y de ahí mis discrepancias con el ex presidente español, porque el revocatorio es un derecho constitucional.
Zapatero como mediador no podía fijar posición de que si le gustaba o no el referéndum. Nos robaron el revocatorio y tampoco se ha dado otra solución.
-¿Para qué es el diálogo?
-Para dar solución a los conflictos y no ha sido así. Si alguien quiere mediar que sea para ayudarnos porque estamos sufriendo y no tenemos tiempo para perderlo en habladurías.
-¿Se está quedando solo el chavismo en América Latina?
-Si gana Guillermo Lasso en Ecuador en la segunda vuelta, a Maduro le quedaría solo Bolivia con Evo Morales en Unasur porque Brasil, con Michel Temer, y Argentina, con Macri, se han desprendido del chavismo.
-¿Cómo se explica que no ha habido un estallido social?
-Es que el venezolano es pacífico, no le gusta la violencia, pero la situación es extrema a punto de estallar.
-¿Estamos en un túnel sin luz, sin elecciones regionales ni municipales?
-Y sin elecciones presidenciales. En Venezuela nos robaron el revocatorio y también nos quitaron las elecciones regionales y municipales.
-¿Entonces qué queda? ¿La insurrección popular?
-No hay democracia sin voto.
-¿Habrá que esperar que Maduro termine su mandato en enero del 2019?
-Como no hay elecciones entramos en la dimensión desconocida de la incertidumbre total.
-¿Qué hacer con la desesperanza?
-Tenemos desesperanza y desasosiego. Estamos metidos en un túnel donde no se ve ninguna luz. Debemos despertar y que el país reclame elecciones. La gente tiene que reaccionar. Hay que presentar una hoja de ruta.
-¿Si se convocan elecciones qué cargo aspiraría usted? ¿Buscaría la presidencia o repetir como gobernador de Miranda?
-Es una decisión que estoy próximo a tomar. Para nadie es un secreto que mantengo mi aspiración de dirigir este país. Y ya fui dos veces candidato presidencial con Chávez en 2012 y Maduro en 2013. Pero eso lo anunciaré en su debido momento.
-Ya comenzó la renovación de los partidos políticos con muchas críticas, ¿su partido Primero Justicia participará o se abstendrá?
-Ahí no hay ningún proceso de auditoría. Primero Justicia participará en la revalidación. Parece que el gobierno busca crear su propia oposición oficialista.
-¿Esta revalidación de los partidos terminará como el proceso del referéndum revocatorio presidencial para que no haya elecciones?
-Este proceso es muy largo y engorroso. Busca fraccionar, dividir y elegir a su propia oposición. Es una excusa para no convocar elecciones. No hay cronograma electoral, es lo que han dicho.
-¿Con la renovación partidista el gobierno busca distraer a los partidos para no hacer elecciones?
-Si nosotros participamos en la revalidación no significa que no estemos luchando por las elecciones. Todo al mismo tiempo.
-¿Esto es una dictadura?
-Claro que sí. Hace rato que Maduro cruzó la raya. Pero no es la dictadura clásica como la que conocemos del siglo pasado.
-¿La preocupación de la gente no son las elecciones sino la búsqueda de comida?
-Para salir de la crisis necesitamos elecciones para cambiar de gobierno. Pero es verdad que la principal preocupación de la gente es la crisis económica. Estamos en una mezcla asesina y perversa, de tener una brutal inflación, entre 700 y 1.000% para los alimentos y escasez de comida.
-¿El país está al borde de la hambruna?
-Por supuesto que hay una hambruna que el gobierno intenta ocultar en los medios oficiales donde no aparece la noticia de la muerte de niños por desnutrición o por falta de medicamentos. Venezuela ya superó el 82% de pobreza general y de 52% de pobreza extrema.