Hebe, de golpeada a golpista

Hebe, de golpeada a golpista

Por Alfredo Leuco - Gentileza Radio Mitre

A esta hora todavía no se sabe si la fuerza pública pudo cumplir la orden del juez Marcelo Martínez de Giorgi. A esta hora todavía no se sabe si Hebe Bonafini fue llevada a declarar tal como indica el artículo 148 del Código Procesal Penal.

Lo que se sabe es que la jefa de Las Madres de Plaza de Mayo dijo que la querían hacer desaparecer pero que aunque la maten va a estar presente en la lucha contra Macri al que la semana pasada identificó con Adolf Hitler. En su arenga en la tradicional ronda de los jueves, Hebe dijo que ella tiene una sola conductora y una sola presidenta: Cristina Fernández de Kirchner y que “el pensamiento no se puede encarcelar”.

Estaba rodeada por un cordón de soldados cristinistas como Carlos Zannini, Oscar Parrilli, Axel Kicillof, el Cuervo Larroque, Martin Sabatella y Leopoldo Moreau, entre otros.  Antes había sido más escatológica cuando le dijo al juez que se “metiera la citación en el culo”. Hebe de Bonafini eligió convertirse en una provocadora de incidentes y en colocarse en un lugar de extorsión a la democracia y desafío a la ley y la justicia.

Dolorosamente, creo que la mejor imagen con la que se podría resumir los más de 12 años de gobierno del kirchnerismo, es un pañuelo blanco tapando plata negra. Es una síntesis perfecta. Y hoy más que nunca eso queda claro. Por eso,  Bonafini, tuvo que redoblar la apuesta y vomitar barbaridades cargadas de autoritarismo y soberbia. Ella dijo que el juez Marcelo Martinez de Giorgi es un pavo al servicio de Clarín.

Es un escupitajo a la justicia digno de alguien que no cree y nunca creyó en la democracia republicana y si apostó a los juicios musolinianos en la plaza pública y a agraviar a todo los que pensaran distinto.

Pido disculpas por el lenguaje chabacano pero repito textualmente lo que dijo la titular de Las Madres de Plaza de Mayo.

Como si esto fuera poco, Hebe amenaza al juez y le dice que está esperando que la vayan a buscar por la fuerza pública y que a estar acompañada por un montón de militantes. Eso es mojarle la oreja. Decirle, si te atreves a detenerme vamos a generar un escándalo de alcance internacional. ¿Se imagina esa foto de Hebe rodeada de gendarmes o policías y hasta esposada? Recorrería al mundo y levantaría una gran reacción adversa. Es que Hebe todavía es considerada una valiente luchadora por la aparición con vida de sus hijos y de todos los desaparecidos. Ella y las madres fueron claves para quebrar a la dictadura. Porque lo hicieron de forma pacífica. Al estilo David y Goliat. Fue pañuelos contra fusiles. Eso le dio prestigio. Porque fue el símbolo de una mujer común que fue muy golpeada por el golpe. Pero es tanto el cambio de Hebe que de golpeada pasó a ser golpeadora de la normas y la convivencia en legalidad y golpista en tanto apuesta a derrocar al actual gobierno democrático. Pocas veces alguien que llegó tan arriba terminó tan abajo. Por eso se atrinchera contra la convocatoria de un juez. No se siente igual a todos ante la ley. Siente que tiene coronita, que debe tener privilegios, que su condición de familiar de víctimas la transforma en una persona intocable. Y el asesinato o desaparición de un familiar te transforma en víctima de los genocidas. Pero no te transforma en un monumento a la ética. Y mucho menos ahora que se sabe que Hebe cometió o toleró por los menos dos delitos graves. La estafa de más de 200 millones de pesos en la Fundación Sueños Compartidos y en la universidad de las Madres. Manejaron dinero que según Sergio Schocklender se lo fumaron, entre otros, Julio de Vido, José López y Amado Boudou con la complacencia de Hebe y la jefatura de Néstor y Cristina. Ayer Lopecito dijo que el encargado de monitorear y controlar todo ese flujo de dinero era Abel Fatala, su segundo, otro que en algún momento levantó la bandera de la honradez desde el Frepaso de Chacho Alvarez y terminó llenándola del barro de los negociados y la corrupción.

Tal vez alguien pueda cuestionar la ética de los hermanos Schocklender pero fue Hebe la que lo elevó a Sergio a la categoría de hijo cuando valientes y honrados militantes de los derechos humanos como Vicente Zito Lema le advertían que estaba cometiendo un error. Pero ella, mandona, altanera y dueña de la verdad jamás quiso escuchar a nadie. Ahora no quiere ni escuchar al juez. Dice que le trucharon la firma pero no lo quiere decir ante quien corresponde. Y de paso aprovecha su edad para decir que no tiene miedo de ir presa porque su vida no vale nada y tiene 90 años.

En dos palabras su mensaje es: la justicia se respeta si hace lo que yo quiero. De lo contrario no se respeta. Es la misma lógica patotera y jurásica de sus admirados Fidel Castro y Hugo Chávez.

Los Kirchner profanaron la bandera sagrada de los derechos humanos, los corrompieron y luego de usarlos como cobertura para sus actos delictivos los arrojaron a un costado del camino. Eso es imperdonable. Por eso hace un tiempo propuse la creación de nuevos organismos de derechos humanos.

Yo no creo ni digo que Hebe se haya enriquecido como Néstor, Cristina, Báez o Julio de Vido. Digo que ella y solo ella fue la responsable de darle alas de ángel a un demonio como Schoklender.

Después fue un vale todo. Hebe quemó todo su prestigio. El 24 de marzo pasado entró a la plaza en un camión del brazo de Aníbal Fernández y Guillermo Moreno otros personajes patoteros que gozan del mayor desprestigio social y que se lo han ganado en buena ley. Ambos tienen causas abiertas ante la justicia y ambos fueron los mariscales de las derrotas electorales del Frente para la Victoria.

Hebe insultó varias veces al Papa Francisco hasta que finalmente Bergoglio la recibió y puso la otra mejilla. Y se la pasó elogiando al General Milani y maltrató a la madre del soldado desparecido Agapito Ledo que era una madre de plaza de Mayo en La Rioja. Cocinó en la ESMA con otro malandra de estado que tiene destino de cárcel como Amado Boudou. Poco menos que celebró el atentado de los terroristas de estado de Bin Laden contra las Torres Gemelas que asesinaron 5 mil personas en un segundo, las acciones del narcoterrorismo de las FARC, o los homicidios de la ETA, los del tiro en la nuca como dice Serrat.

Y  así podría seguir la larga lista de actitudes estalinistas y agresivas. Solo hay que preguntarla a Las Madres de Plaza de Mayo –Línea Fundadora porque tuvieron que hacer rancho aparte.

Durante una discusión con Horacio Verbitsky, Bonafini cayó en un antisemitismo despreciable y lo acusó de ser “judío y además sirviente de los Estados Unidos y estar a sueldo de la Fundación Ford”.Después, Hebe insultó hasta a Adolfo Pérez Esquivel, el Premio Nóbel de la Paz que estuvo preso durante la dictadura y fue casi un padre de Plaza de Mayo.

Yo entiendo que tuvo que sufrir el más terrible dolor al que puede someterse a un ser humano: la desaparición de sus hijos. Soy consciente de que muchos, por mucho menos, enloquecerían. Pero la tragedia no puede ser un certificado de impunidad ni de inmunidad. El desgarro no da fueros. La impunidad es como la muerte. No hay ninguna buena. De aquella lucha contra los asesinos de ayer, a la intolerancia y el dogmatismo blindado de hoy. Aquellos Sueños compartidos se transformaron en pesadillas. De aquella mujer golpeada por el golpe a esta mujer golpista.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA