Juan Giménez era un historietista reconocido a nivel mundial por su talento. Desde pibe le encantaba dibujar y, en su Mendoza natal, pasaba largas horas lápiz en mano con su gran pasión. Aunque desde hace varias décadas vivía en España, siempre volvía a su pago. Ayer, a sus 73 años, fue justamente su terruño de origen el lugar que le dio la despedida tras fallecer por coronavirus.
Pero el arte es una de esas pocas maravillas que trasciende la muerte y sin dudas, la obra de Giménez, será un ejemplo de ello. Nacido el 16 de noviembre de 1963 y formado en la Facultad de Artes y Diseño de la UNCuyo, sus primeros pasos en el mundo de la historieta los dio empapado en la influencia de Hugo Pratt (“Corto Maltés”), Francisco Solano López (“El eternauta”) y, en especial, con la serie “As de pique”.
En los 70', cruzó el charco para Europa y se radicó en España, adonde se perfeccionó en la Universidad de Barcelona. El también dibujante, se convirtió en un artista de culto con su trabajo para la película animada “Heavy Metal” (conocida también como “Universo en fantasía”), una cinta estrenada en 1981 y cuya combinación de cómic y música rock, gracias a su banda de sonido con canciones de Black Sabbath, Cheap Trick, Journey y Devo –entre muchos más- la convirtió en una obra maestra.
Para ese film, un homenaje al cómic por excelencia, el mendocino aportó su arte en el segmento “Harry Canyon”. Otro de los grandes momentos en su carrera fue “La casta de los metabarones”, un influyente cómic con guion y dirección Alejandro Jodorowsky. El diseño de sus personajes, que mixaba un estilo realista con otro épico-futurista, sin duda son su marca registrada.
Además de las mencionadas, Estrella negra (1979), Cuestión de tiempo (1982), Basura (1988), El cuarto poder (1989) y Ciudad (1991), fueron otras de sus magníficas creaciones. El arte de Juan Giménez, que despedimos con muchísimo cariño los mendocinos y artistas del mundo entero a través de las redes sociales, quedó plasmado en muchísimas publicaciones realizadas en España, Italia, Inglaterra y Canadá.
Además, por supuesto que el gran artista recibió numerosos premios, principalmente en su década más productiva que fue la de los 80. Por citar un ejemplo, de tantos, la revista Comix Internacional (de España) lo consideró “el mejor dibujante del mundo”. También ganó el premio Gaudí del Salón del Cómic de Barcelona en 1990 y el consagratorio Yellow Kid (Italia).