El 26 de julio, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Cuyo aprobó por unanimidad la donación a la Municipalidad de Capital de los terrenos que le pertenecían y que son ocupados desde más de cuatro décadas por el barrio Flores.
La donación permite que tanto éste como el barrio Olivares sean urbanizados y cuenten con los servicios de luz, agua, cloacas y gas. El objetivo es que el municipio pueda disponer de los terrenos para construir calles, acequias y la infraestructura necesaria para los servicios.
También se les entregará el dominio de los terrenos y casas a sus habitantes. Son aproximadamente 4 hectáreas que la UNCUYO cedió, de las cuales 2,5 hectáreas serían para las obras de urbanización. El resto del terreno se convertirá en espacio verde para diferenciar los límites entre los futuros barrios y el Centro Universitario.