Ya son 13 los muertos que se registraron en el país por esta enfermedad. Algunos especialistas critican el rol estatal. Se trata de un problema de salud pública que tiene en vilo al país. Es que el hantavirus ya se llevó 13 vidas en la Argentina y, al no tener un tratamiento específico, el miedo va en aumento. Y en lo que concierne a las políticas de estado al respecto, se pusieron en debate las acciones que se llevan a cabo.
"El problema es que no hubo una campaña de la Secretaria de Salud, no hay acciones por parte del Estado", expresó el neumonólogo Carlos Luna (M.N. 46388), quien es ex presidente de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR), quien considera que las acciones en países como Estados Unidos y Chile fueron más eficientes. En tanto, el ex ministro de Salud, Daniel Gollán, también opinó que los brotes se produjeron por una ausencia en las políticas estatales.
Por su parte, desde la Secretaría de Salud, aseguraron que mantienen constantes reuniones para supervisar las tareas, que consisten en diseñar un circuito de derivación para la atención de las personas, y en procesar información necesaria para formular las alertas sanitarias. En ese sentido, realizaron un estudio de infección por hantavirus con el fin de detectarlo antes del inicio de la sintomatología para poder aislar al paciente y cortar la cadena de transmisión.
Además, desde esa cartera, explicaron que viajaron a Epuyén expertos en bioseguridad de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de la Salud. Con respecto a lo estrictamente sanitario, si el virus llega a afectar a los pulmones, se lo toma como una "neumonía grave", que es diagnosticada como "síndrome pulmonar por hantavirus". En estos casos, se requiere de una atención inmediata y de un rápido diagnóstico para el tratamiento, ya que la tasa de mortalidad es alta, un 30% para la cepa Andes Sur.
El diagnóstico rápido se realiza mediante métodos de laboratorio, la reacción de cadenas de polimerasa (Polimerase Chain Reaction o PCR), transcriptasa reversa que se dispone en centros especializados y permite confirmar la infección en forma casi inmediata, o por serología. ¿Cuándo se considera que es un cuadro de mayor gravedad? Se da cuando la falta de oxigenación y el colapso circulatorio ponen en peligro la vida. Para paliar esta situación, además de las medidas de sostén, se evalúa la chance de reemplazar durante algunos días la función pulmonar deteriorada y proveer asistencia circulatoria mediante un proceso de oxigenación.
El problema es que en la Argentina la bomba circulatoria (denominada ECMO) para llevar a cabo ese tipo de tratamiento existe en pocos centros asistenciales. En este sentido, se torna fundamental contar con un ECMO de traslado, con el que ya cuenta el país. "No hay un tratamiento específico. Se requiere un diagnóstico rápido que se puede hacer en 24 o 48 horas. No hay una forma de prevenir o tratar, sólo queda no exponerse. Es un área que requiere investigación, el hanta es un problema de gran parte del mundo", explicó Luna.
Y detalló: "Lo que provoca es acumulación de agua en los pulmones y una deficiencia respiratoria. Esto significa que el líquido sale de la sangre e ingresa a los alvéolos -divertículos terminales del árbol bronquial-". Sobre el brote que comenzó en el noroeste del país, el especialista explicó que no se trata de algo nuevo: "Hemos atendido en años anteriores casos por hantavirus. Los primeros fueron en los 90 en Estados Unidos, ya en el 95 se vieron los primeros casos en la Argentina que fueron más agresivos".
En el país se reconocen más de 100 casos por año, siendo Argentina y Chile donde el hantavirus es más frecuente, aunque hay numerosos pacientes en Brasil, Paraguay, Perú y Panamá.