El Cairo. Una estatua de granito de la diosa Sejmet, que pertenece a la época del faraón Amenhotep III (1390-1352 a.C.), fue descubierta por las autoridades egipcias en la ciudad monumental de Luxor, unos 700 kilómetros al sur de El Cairo.
El Ministerio de Estado egipcio para las Antigüedades anunció ayer en un comunicado que la estatua fue hallada dentro del templo de la diosa Mut, al sur del famoso templo de Karnak, informó la agencia de noticias EFE.
El hallazgo ocurrió durante los trabajos de restauración del templo de Mut, que todavía sigue sin estar abierto al público.
La estatua, que mide 180 centímetros de altura, representa a la diosa Sejmet, que tiene cuerpo humano, así como un sol y una cobra encima de su cabeza.
Además, la figura lleva en una mano una flor y en la otra la llamada llave de la vida, común entre los faraones.
Diosa de la Guerra
El sitio Wikipedia detalla que Sejmet (Sekhmet), "La más poderosa", "La terrible", fue el símbolo de la fuerza y el poder, en la mitología egipcia. Era considerada una diosa de la guerra y de la venganza. También conocida con los nombres de Sakhmet, Sekhet, Sekhem, Shakti, Nesert.
Fue representada como un ser, o con cuerpo de mujer y cabeza de leona, aunque con melena, generalmente coronada con el disco solar, el Uraeus (serpiente protectora), y portando el Anj y una flor de papiro o loto, y con flechas. También como mujer con cabeza de cocodrilo, o como el ojo udyat.
Era hija del dios Ra. Su esposo era Ptah y su hijo, Nefertum. Su ira era temible pero, si se conseguía apaciguarla, otorgaba a sus adoradores el dominio sobre sus enemigos y el vigor y la energía para vencer la debilidad y la enfermedad.
En algunos casos fue considerada aliada y protectora de Ra, dado que daba muerte a quienes osaran enfrentarse o atacar a la monarquía divina o terrenal.