El juez en lo penal Diego Slupski dispuso una nueva junta médica para determinar si el empresario mediático Ricardo Fort murió como consecuencia de una mala praxis médica.
Lo hizo obedeciendo un fallo de la Cámara del Crimen que revocó el sobreseimiento para los facultativos que atendieron a Fort en 2013, después de otra junta médica en la que un grupo de expertos concluyó que el deceso se había producido por "muerte súbita“.
Slupski ordenó una junta médica conjunta entre el Cuerpo Médico Forense y el decanato de la Facultad de Medicina, para "arribar a un dictamen conjunto en torno a la muerte de Fort así como en lo relativo a la actuación de los profesionales que lo asistieron".
La anterior experticia había determinado que Fort padecía una infección generalizada, pero que ello no tuvo incidencia en la falla cardíaca de la que no pudo recuperarse.
Una familiar de Fort, querellante en la causa, apeló el fallo y la Cámara dispuso la reapertura de la investigación, en cuyo marco el juez Slupski ordenó establecer fehacientemente si "existió relación entre la infección generalizada que padecía y el cuadro de sepsis y/o el fallo cardíaco“.
Fuentes con acceso al expediente estimaron que el nuevo peritaje podría demorar entre seis meses y un año antes de elaborar una conclusión definitiva.