Muchos recordarán la ola de rumores que emparentaron sentimentalmente a Lady Gaga y Bradley Cooper después del estreno de "Nace una estrella". De hecho, en la actuación conjunta que dieron en la pasada ceremonia de los Oscar dejó a todos con la boca abierta y una gran duda a flor de piel: ¿Qué pasa, o pasó, realmente entre ellos?
El punto es que poco después de aquello, en junio, Cooper (44) e Irina Shayk (34), su novia por cuatro años, se separaron. Ella, de notable perfil bajo, evitó siempre pronunciarse en el tema... hasta ahora.
Aunque hubo negación entre las partes involucradas, Shayk (quien tiene con Cooper una hija de dos años) comentó incluso en varias entrevistas que ella también era amiga de Lady Gaga.
"Hemos tenido mucha suerte de haber tenido lo que tuvimos juntos. La vida sin B (Bradley) es un terreno totalmente desconocido para mí", dijo ahora a la revista Vogue. Y aunque en un principio se había difundido de que la separación había sido en buenos términos (se negoció una tenencia compartida), con el paso del tiempo se fueron sabiendo detalles.
Al respecto expresó: "Creo que en todas las buenas relaciones sentimentales uno ofrece lo mejor y lo peor. Así es como funciona la naturaleza humana. Por eso dos grandes personas no tienen por qué ser una gran pareja".
Shayk también habló sobre cómo vive la crianza de su hija: "Es complicado encontrar el equilibrio entre ser madre soltera y ser una mujer trabajadora que se gana la vida. De verdad, todavía hay días en los que me levanto y pienso: ‘Dios mío, no sé qué hacer, me estoy desmoronando'".
