El diputado Nacional por Mendoza del FPV Guillermo Carmona explicó que no asistirá a la cena con Barack Obama en solidaridad con el presidente del Bloque de Diputados del FPV-PJ Héctor Recalde, que no fue invitado.
El mendocino expuso una lista de puntos que le hubiese gustado incorporar en la relación bilateral entre Argentina y Estados Unidos.
En su cuenta de Facebook, Carmona dijo que "todo representante de un Estado extranjero con el que la Argentina mantiene relación diplomática merece ser recibido por los representantes de los poderes públicos" y que eso no necesariamente "implica adscribir a los valores, posiciones políticas o personales que exprese el visitante".
Sin embargo, explicó su ausencia.
"He decidido declinar a la invitación para concurrir a la recepción del presidente Obama por un sencillo motivo: el presidente del Bloque de Diputados del FPV-PJ Héctor Recalde no ha sido invitado".
“El gobierno podría argumentar que el diputado Recalde no está en Buenos Aires por encontrarse de licencia y que por tal motivo no fue invitado. Resulta ser que tampoco el vicepresidente del Bloque Luis Basterra ha sido invitado. Considero que se trata de omisiones inexplicables por los mismos argumentos en relación al valor de la representación político-institucional expresados antes, que en este caso deberían reconocerse a las autoridades de los bloques legislativos. Mi presencia en el acto de ninguna manera podría reemplazar la de quienes hoy conducen a nuestro bloque”, dijo.
A modo de demostración, Carmona enumeró las ceremonias de recibimiento a las que ha asistido. Estuvo junto a la presidenta de Brasil Dilma Rousseff, al presidente y primer ministro de China, Xi Jinping y Wen Jiabao, respectivamente.
También participó del recibimiento de Vladimir Putin, presidente de Rusia, del de Ollanta Humala (Perú), Nicolás Maduro (venezuela) y Sebastián Piñera y Michel Bachelet (Chile), entre otros. "En lo que va de la presidencia de Mauricio Macri fui invitado a participar de la ceremonia de recepción del presidente de Francia Francois Hollande, a la que no pude asistir por compromisos ineludibles en el Congreso Nacional", escribió.
Lo que Carmona quería agregar a la agenda bilateral
"Lamento enormemente la situación porque deseaba saludar al presidente de los Estados Unidos de América y con mi presencia y la de otros diputados del FPV-PJ dar una señal sencilla pero contundente de que hay una agenda en la relación bilateral que no debería estar ausente, la que tiene que ver con algunas de mis preocupaciones e inquietudes, compartidas seguramente por muchos argentinos y argentinas", agregó Carmona y detalló los puntos que lo preocupan.
- Mi convicción acerca de la necesidad de un cambio sustancial en el modo de relación de su país hacia los países de la región, de manera que sean dejadas de lado las prácticas imperialistas vigentes desde que se formulara la doctrina Monroe.
- La solicitud de que su país no aliente ni acompañe ninguno de los movimientos de desestabilización que ponen en riesgo la vigencia de la democracia en diversos países de la región.
- Mi pedido de que el desbalance comercial en favor de su país y en desmedro del nuestro sea corregido.
- La sugerencia de que sea revisada la política de “guerra al narcotráfico” que impulsa su país, la que ha agravado la situación de avance de ese flagelo en los países de la región, en algunos casos de manera dramática como ocurre en México y que con preocupación vemos crecer en Suramérica al ritmo de la militarización y de las intervenciones de la DEA.
- La reflexión en torno a los efectos perniciosos que tiene el libre comercio en los países en desarrollo que intentan con grandes esfuerzos solidificar su mercado interno y desarrollar sus industrias, como así también colocar en los mercados del mundo desarrollado sus productos primarios sin que esos países les impongan resistencias proteccionistas.
- La expectativa de que el presidente de los Estados Unidos de América pida disculpas en nombre de los gobiernos de su país por el rol decisivo que tuvieron en la concreción de los golpes cívico-militares, que en la década de los ’70 produjeron la violación sistemática de los derechos humanos mediante la tortura y desaparición forzada de decenas de miles de latinoamericanos y la apropiación de niños a sus padres cautivos.
- La expectativa de un cambio de la posición estadounidense en torno a la cuestión Malvinas, para que abandone su juego funcional al colonialismo británico que perdura bajo la forma del neocolonialismo en una importante porción de nuestro territorio.
- La humilde y respetuosa solicitud de que revise sus recientes dichos relativos a la relación bilateral durante los gobiernos del FPV hacia su país, las que pareciera estuvieron destinadas más bien a complacer al actual presidente argentino que a evaluar objetivamente el nivel de relación entre nuestros países en ese periodo de gobierno.
- Comentarle, además, la enorme expectativa que me genera que su correligionario demócrata y aspirante a sucederlo en la presidencia, Bernard Sanders, sostenga, con un interesante nivel de aceptación de parte del pueblo estadounidense, muchas de las políticas en favor de la igualdad y la justicia social que hemos impulsado desde el peronismo en nuestro país, situación que nos hace sentir más cerca de millones de estadounidenses que reclaman justicia social y redistribución de la riqueza. Del mismo modo, manifestarle mi grata sorpresa ante el rechazo de Sanders y de la otra precandidata demócrata a la presidencia, Hillary Clinton, respecto del Tratado Trans Pacífico (TPP), el mega acuerdo de libre comercio concretado por su administración que aparece como una clara amenaza para el desarrollo de nuestra región.
"Es probable que la descortesía del gobierno nacional hacia las autoridades de mi bloque le ahorre al presidente Obama y a sus colaboradores escuchar incorporar esa agenda a la relación bilateral, aunque supongo que por la creciente y decisiva relación con Estados Unidos que impulsa el presidente Macri no faltarán oportunidades en lo venidero para poder expresarlas. Tendremos tiempo de ampliar y precisar nuestros puntos de vista, con la entera convicción de que en la relación con los Estados Unidos lo cortés nunca quita lo valiente", cerró.