No es bueno el panorama para la salud pública de la provincia, los gremios de la
Salud
(
ATE y Ampros
) ratificaron el paro de 72 horas programado para la semana que viene y hoy volvieron a encenderse los cruces con el ministro de Salud,
Matías Roby
.
En la segunda jornada de huelga
tras el fracaso de la reunión paritaria de ayer
, en la que los sindicatos rechazaron la oferta oficial de suba salarial del
30,5% en dos cuotas
, el plan de lucha fue ratificado en la asamblea realizada en el hospital Notti.
Según los gremios, el aumento real sólo alcanzará un 15 por ciento.
Isabel Del Pópolo, titular de Ampros, expuso su confrontación con Roby en diálogo con radio LV10: “No voy a polemizar con él ni hablar a través de los medios, creo que el lugar donde debe hablar el ministro es en la Subsecretaría de Trabajo. Evidentemente el ministro ha cortado el diálogo y no sólo ha ofendido a sus colegas por la rinoscopia sino que ha ofendido a la ciudadanía, porque un ministro de Salud debe velar por ella y él desconoce lo que sufre una familia que tiene un adicto”.
Sucede que el funcionario dio a entender que pediría análisis para trabajadores de la Salud en el marco de un pedido ante el Ministerio de Trabajo de la Nación para
evaluar el quite de la personería jurídica a Ampros
por no acatar la conciliación obligatoria.
En tanto, este mediodía se realizó una olla popular en Casa de Gobierno, donde el representante de ATE, Roberto Macho, aseguró: “El acatamiento de la salud está superando el 90 por ciento. Lamentamos tener que haber llegado a esto por la ineficacia del Gobierno provincial de haber presentado propuestas penosas, vergonzosas”.
La propuesta del Ejecutivo es la siguiente, según detalló Andrés Cazabán, miembro paritario oficial: “El incremento propuesto en los tres regímenes para el sector de la Salud es del 30,5 por ciento: 20% en marzo y 10,5% en julio, con una cláusula de tope de incremento de $ 5.500 en bruto. Esto significa que el incremento máximo va a ser de $ 5.500. Esto implica que los incrementos mínimos, para los sectores de menores ingresos, van a ser del 31% y en los de más altos ingresos del 22% promedio".
Con pocas chances de “arreglar” en el corto plazo, la situación en hospitales públicos y centros de salud se complica.