Tanto los envíos a granel como los de mosto tienen una tendencia irreversible. Así, mientras que entre enero- noviembre de 2012 se registraban exportaciones a granel por 148,5 millones de litros de vino, en 2013 para el mismo período se redujeron a 95,2 millones de litros, 35,9% menos que el período anterior.
Lo mismo sucedió con el mosto, que cayó de 101,5 millones de litros a 85,9 millones de litros, lo que implica una caída de 15,3%. Uno de los datos más alarmantes es la caída del precio promedio de comercialización, que pasó de más de 2 mil dólares entre noviembre y diciembre de 2012 a U$S 1.555 la tonelada en noviembre de 2013, una tendencia que se viene profundizando desde agosto del año pasado, según datos de Caucasia Wine Thinking.
“En Rusia las exportaciones disminuyen por tratarse de productos que se comercializan a granel en competencia con España, que está mejor posicionada por fletes y desde hace unos años vendiendo con precios por debajo de Argentina”, dijo el titular del INV.
En tanto, respecto del comportamiento del mosto, García indicó que “todo indica que este año se alcanzarán las 125 mil toneladas exportadas, unas 10 mil por debajo de 2012, no obstante la disminución de los precios. Nuevamente las expectativas negativas estuvieron por encima de la variación del tipo de cambio, lo que alejó a los exportadores de realizar negocios más agresivos en cuanto a volumen de ventas”.