Las estrellas iluminaron la alfombra roja de los premios Grammy anoche en Los Ángeles, con looks muy sexys, en la fiesta más importante de la música estadounidense
A continuación una selección de los más destacados del desfile de creaciones:
Noche de chicas
Taylor Swift y Selena Gomez hicieron de la gala una noche de chicas y llegaron juntas a la alfombra roja.
La creación de dos piezas de Versace con la que Swift se presentó le valió una ola de alabanzas en Twitter. La estrella vistió una amplia y larga falda fucsia, abierta delante hasta la cadera acompañada por un top rojo.
Una sensual Gomez se lució con un largo y brillante vestido de Calvin Klein, de color azul zafiro y con tirantes delgados, y con el pelo suelto y ondulado.
Gomez y Swift posaron juntas ante las cámaras, una muestra de que la "girl squad" (equipo de chicas) de Swift está más fuerte que nunca.
Lady Gaga, sin embargo, no precisó equipo para llamar la atención. Dejó boquiabierto a todos aquellos que la vieron pasar con una cabellera naranja y vistiendo un extravagante abrigo-vestido largo azul Francia con bordados plateados, un atuendo a lo Ziggy Stardust, un anticipo a su actuación en homenaje al reciente fallecido David Bowie.
Rosado
La cantante británica Ellie Goulding, nominada a Mejor Actuación Pop Individual por su tema "Love Me Like You Do", optó por un look dulce con un vestido simple y rosado claro, de Stella McCartney.
¿Pero quién dice que las chicas son las únicas que se divierten vistiéndose?
Sam Hunt, quien arrasa en el mundo de la música country, también se presentó totalmente vestido de rosado con su traje de Dolce y Gabbana.
Hunt, de 31 años, que es nominado a Mejor Artista Nuevo y a Mejor Álbum de Country, cantó durante la gala junto a Carrie Underwood.
La estrella británica Adele fue probablemente quien vistió el atuendo más tímido de la noche: un romántico vestido negro de mangas largas de Givenchy con bordados y cristales brillantes.
El atuendo fue recibido con opiniones encontradas por los críticos de moda en Twitter.
Demasiado de lo bueno
La alfombra roja de los premios Grammy es un lugar donde muchas estrellas buscan transmitir un mensaje y también mostrar la mayor cantidad de piel desnuda. En 2000, Jennifer Lopez marcó el paso con su pequeñísimo vestido Versace.
La cantante Ciara dejó su pierna izquierda entera al descubierto con un largo vestido negro y blanco.
Pero a veces la exhibición de piel puede ir demasiado lejos. Fue el caso de la cantante Joy Villa, quien arribó a la alfombra roja vistiendo algo que difícilmente puede llamarse un vestido; una extraña creación de tiras metálicas que se parecía al esqueleto de algún animal, que poco lograba ocultar.