Gareth Edwards, quien ya había demostrado su pericia en el terreno de la ciencia ficción con "Monsters", de 2010.
Pero el gigantesco reptil, cuyos derechos pertenecen al estudio japonés Toho, ya había sido llevado al cine por Hollywood en 1998 en la película que significó el primer gran fracaso en la carrera de Roland Emmerich ("Día de la Independencia", "El día después de mañana", "2012"), con un guión falto de ideas y plagado de despropósitos y un elenco inadecuado en el que buenos actores como Matthew Broderick o Jean Reno corrían de un lugar a otro sin tener muy en claro qué hacían ahí.
El director
A los ya citados Juliette Binoche y Bryan Cranston, que ocupan la primera parte del film, se suman en los roles principales Aaron Taylor-Johnson (23 años) como un oficial naval, hijo de los anteriores, que se debatirá entre salvar a sus padres en peligro o a su propia esposa (Elizabeth Olsen, 25 años) y a su pequeño hijo de 4 años, atrapados en San Francisco cuando Godzilla centra su atención en esa ciudad.
Tanto Taylor-Johnson como Olsen debutan en una superproducción luego de haber participado en varias producciones independientes.
"Tenía muchas ganas de cambiar", declaró la actriz, que también estará en la nueva entrega de "Los Vengadores" en 2015. "Quería ser parte de proyectos más grandes y entrar en el club de las actrices a quienes respeto y que me parecen formidables como Jennifer Lawrence y Shailene Woodley", sostuvo.
Su compañero de pantalla, que actuó en "Savages" (2012, Oliver Stone), en la comedia "Kick-Ass" (2010) y su secuela de 2013, y que también será parte de "Los Vengadores" en 2015, ganó 10 kilos de músculos para su papel de soldado en "Godzilla". "No recibí esta consigna de nadie", aseguró. "Pero hago de teniente de la Marina, y con más músculos uno gana fuerza y masculinidad. Es una idea mía, está claro, pero hace que uno tenga un porte y un andar diferentes".
Para el productor Thomas Tull, gran fanático de monstruos -"Pacific Rim" (2013)-, hacer un nuevo "Godzilla" es un sueño de la infancia que se hace realidad. "Es el rey de los monstruos", aseguró. "No sólo es enorme, sino que también es un reactor nuclear ambulante", contó el productor acerca de la verdadera estrella del film que, para él, ya forma parte de los "íconos culturales" que ostenta la humanidad.
