A tres años del terremoto y tsunami que devastó una amplia región del centro sur del país, el gobierno derechista de Sebastián Piñera arremetió contra la ex presidenta socialista Michelle Bachelet y le exigió pedir perdón por no haber alertado oportunamente a la población.
"Bachelet debiera reconocer públicamente la responsabilidad política que tuvo en el desastroso manejo que hubo en la madrugada del 27 de febrero de 2010", afirmó la vocera oficial del gobierno, Cecilia Pérez.
El emplazamiento oficial se produce cuando Bachelet se encuentra de vacaciones en una residencia lacustre en el sur del país y no ha confirmado si se postulará nuevamente a la presidencia.
Tras el terremoto de magnitud 8,8, las autoridades descartaron inicialmente un maremoto confiando en la información oficial que les entregó la Armada, que desvirtuaba el fenómeno. Del alrededor de medio millar de víctimas de ese día, 181 correspondieron a personas fallecidas a causa del tsunami.