Vencedores y derrotados, a cuatro días de las elecciones legislativas nacionales, se reunieron ayer para estrechar filas detrás de un reclamo común: una quincena de mandatarios y representantes provinciales reafirmaron ayer que no resignarán fondos coparticipables, sobre todo ante el reclamo planteado por Buenos Aires a la Corte Suprema para actualizar el llamado "fondo del Conurbano", una partida monetaria extra creada en los años noventa.
Los gobernadores temen que un fallo del máximo tribunal de justicia favorable al gobierno de María Eugenia Vidal termine afectando los recursos coparticipables del resto.
Sin más, cálculos oficiales hechos por el gobierno de Córdoba estiman un perjuicio de 7.000 millones de pesos anuales para esa provincia. En la reunión, también se abordó acordar una visión común frente al debate con el Poder Ejecutivo sobre la coparticipación federal.
Se destacó la ausencia de los mandatarios de las provincias gobernadas por Cambiemos, que almorzaron el martes con el presidente, Mauricio Macri.
La reunión de ayer se celebró en el Consejo Federal de Inversiones y ofició de previa de otra cumbre sobre la que el Gobierno nacional alienta muchas expectativas.
El Presidente convocó para el próximo lunes a todos los gobernadores, pero también a representantes de otros poderes del Estado, a una cumbre en las que se presentarán una serie de medidas definidas como “estructurales”.
"La voluntad es participar en esta nueva etapa que se abre en el país, de ordenamiento socioeconómico, para que sea de crecimiento de la economía, de generación de empleo genuino y de mayor federalismo". Juan Schiaretti Gobernador de Córdoba.
“La voluntad es participar en esta nueva etapa que se abre en el país, de ordenamiento socioeconómico, para que sea de crecimiento de la economía, de generación de empleo genuino y de mayor federalismo”, dijo el gobernador Schiaretti, en referencia a la convocatoria del Presidente. Pero esa “buena voluntad” no implica resignar fondos coparticipables, se aclaró.
El gobernador de Tucumán, Juan Manzur, uno de los pocos que pudo exhibir el domingo pasado una victoria contundente sobre Cambiemos, fue terminante: "No estamos dispuestos a resignar ni un solo peso de lo que les corresponde a las provincias", se plantó. El mandatario tucumano estima un perjuicio de 3.500 millones de pesos anuales.
También recordó que del total de los recursos “el 58 por ciento es para la Nación y solo el 42 por ciento para la provincias y eso tenemos que revertir porque se hace inviable para las provincias”.
Acaso por su condición de decano entre sus pares, Schiaretti estuvo al frente de la reunión junto a Manzur y el sanjuanino Sergio Uñac, otro de los mandatarios peronistas que salió fortalecido el domingo por su clara victoria sobre el oficialista Cambiemos.
También estuvieron los gobernadores peronistas Gustavo Bordet (Entre Ríos), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Sergio Casas (La Rioja), Gildo Insfrán (Formosa), Hugo Passalacqua (Misiones) y Domingo Peppo (Chaco), además de Omar Gutiérrez (Neuquén) y el socialista Miguel Lifschitz (Santa Fe), y representantes de Santiago del Estero, Salta, Catamarca y San Luis.
En la larga y variada mesa, también hubo lugar para el jefe de los senadores peronistas, Miguel Angel Pichetto, pieza que asoma clave para quienes pretenden avanzar en un PJ sin Cristina Fernández.
Sobre el fondo del Conurbano, existe un consenso entre los gobernadores de que el monto debe tener algún tipo de actualización (nunca los 53 mil millones de pesos anuales que reclama Buenos Aires), pero entienden que la diferencia debe aportarla la Nación, y no con recursos coparticipables.
"No estamos dispuestos a resignar ni un solo peso de lo que les corresponde a las provincias". Juan Manzur - Gobernador de Tucumán
“Hace falta una convocatoria (del Poder Ejecutivo) a los cuadros técnicos más allá de la convocatoria presidencial a los gobernadores”, dijo el sanjuanino Uñac.
Los gobernadores reiteraron la voluntad de resolver la controversia del fondo del Conurbano “en una mesa de diálogo con todas las provincias y el Gobierno nacional y debe hacerse ahora y no esperar” un eventual fallo de la Corte Suprema.
Sobre la cumbre del próximo lunes en el Centro Cultural Kirchner, dijeron que no se puede eludir la discusión sobre algunas de las reformas que impulsa el Gobierno nacional como "excesiva presión impositiva y la cuestión laboral". A lo que agregaron la preocupación de las provincias: la "concentración de fondos crecientes en Nación".
En un breve cruce con la prensa, Manzur aludió a otros dos temas: el desafuero de Julio De Vido y el reagrupamiento del peronismo tras unas elecciones nacionales desfavorables, a su entender, prescindiendo de la figura de Cristina Fernández de Kirchner, de quien fue ministro de Salud entre 2009 y febrero de 2015.
“El desafuero fue correcto porque se trató de un pedido de la Justicia”, dijo Manzur.
Sobre la inclusión de la ex presidenta en la discusión de la reorganización partidaria, calificó el de Cristina como un “ciclo terminado”, y que se debe pensar “en propuestas nuevas y superadas”.
“Hay que mirar hacia delante, sentarse a acordar y negociar y tener una perspectiva de futuro mejor”, agregó.