Gobernadores, las piezas clave de la elección presidencial

En la votación del domingo se verá cuánto influyen los mandatarios provinciales que apoyan a Fernández, Macri y Lavagna.

Gobernadores, las piezas clave de la elección presidencial
Gobernadores, las piezas clave de la elección presidencial

La foto del escenario impacta. Doce gobernadores en ejercicio y otros tres electos. Alberto Fernández y Cristina eligieron esa imagen de fondo para mostrar el apoyo cerrado del peronismo a su fórmula. Si se suma a la ausente Alicia Kirchner -concentrada en la elección en Santa Cruz-, más de la mitad de los mandatarios del país funcionan como sostén del Frente de Todos.


Peronistas K. Algunos de los gobernadores que sumó Alberto F | Los Andes
Peronistas K. Algunos de los gobernadores que sumó Alberto F | Los Andes

En la vereda de enfrente, la de Juntos por el Cambio, están Mauricio Macri, Miguel Pichetto y un grupo acotado de 5 mandatarios provinciales. Son menos de la mitad que los K, pero gobiernan a un 53,06% del padrón electoral nacional.


Oficialistas. Vidal y Cornejo son claves para Macri. | Los Andes
Oficialistas. Vidal y Cornejo son claves para Macri. | Los Andes

¿Quién tiene entonces más apoyo de gobernadores para las PASO del domingo? En el paneo cuantitativo, a los 13 K y los 5 macristas se suman 2 mandatarios de Consenso Federal y 4 neutrales.

En el recorrido cualitativo, el 53,06% del padrón que representan los 5 oficialistas es muy superior al 21,21% de los 13 mandatarios del PJ que apoyan a Alberto F.. También superan el 14,55% de los neutrales y el 11,19% de la dupla lavagnista.

Como contó ayer este diario, el peso de cada distrito es muy disímil: va de casi un 37% de todo el padrón nacional concentrado en la provincia de Buenos Aires al 0,40% de Tierra del Fuego.

¿Esto significa que Macri corre con ventaja? No necesariamente. Por un lado, con la imagen del Presidente golpeada por la crisis económica, las figuras de Vidal y Larreta en sus distritos pueden resultar claves para sumarle puntos para la presidencial. Lo admiten en el propio kirchnerismo: es una de las incógnitas de la elección y una señal de que la unificación era uno de los salvavidas para mantener con chances a Macri.

Pero eso no impide, por ejemplo, que el Frente de Todos sea favorito en la Provincia de Buenos Aires -según mostraban las encuestas previas a la veda de publicación de sondeos-, incluso para el tramo a gobernador.

Tener un mandatario bonaerense, está claro, no es garantía de triunfo contundente: ya lo sufrió Daniel Scioli en 2015. Ganó pero por poco. En la Provincia hay un factor clave: los intendentes. ¿Pesa más que Vidal sea gobernadora o que Verónica Magario gestione La Matanza?

Como contracara, en la Ciudad de Buenos Aires y el resto de las provincias que gobierna el oficialismo (Mendoza, Corrientes y Jujuy), el triunfo de Macri estaría garantizado. Y en algunos casos, sería muy holgado.

Los mismos pronósticos tiene el Frente de Todos en los 13 distritos que maneja el PJ. Allí, la duda, es la diferencia. ¿Será de hasta 40 puntos, como logró Scioli en 2015 en provincias del Norte?Como sea, entre todas las provincias K suman poco más del 21% de todo el electorado nacional.

¿Esto significa que Alberto Fernández corre con desventaja? No necesariamente. Un buen ejemplo es Santa Fe. Allí gobierna el socialista Lifschitz -promotor central de la candidatura de Lavagna-, pero ya fue electo para reemplazarlo Omar Perotti, uno de los invitados al acto de cierre del Frente de Todos. Así, el peronismo K tiene buenas perspectivas en ese distrito. Lo mismo que en Salta, donde ni siquiera la presencia del gobernador Urtubey en la fórmula de Consenso Federal garantizaría un gran resultado para ese frente.

Los neutrales

De las cuatro provinciales neutrales, el caso de estudio será Córdoba. Juan Schiaretti se vio tironeado por ambos lados de la grieta: forma parte del PJ, pero es el opositor de mejor relación con Macri. ¿Cómo zafó? Cortó por lo sano. Literalmente, ya que decidió que su fuerza local (Hacemos por Córdoba) vaya con boleta corta, sólo con candidatos a diputados nacionales. Para Presidente que decida cada uno.

Su prescindencia tiene matices: el titular del PJ cordobés, el senador Carlos Caserio, más un grupo de intendentes peronistas, apoyan on the record a Alberto y Cristina. Otra vez, la duda es cuánto pesará ese apoyo el domingo. En Córdoba, segundo distrito con más electores del país (8,71% del total), se descuenta que habrá nuevo triunfo macrista. La duda es si tendrá la envergadura suficiente como para compensar otras derrotas o performances menores como en 2015.


Lavagnistas. Urtubey y Lifschitz, espadas de Consenso Federal. | Los Andes
Lavagnistas. Urtubey y Lifschitz, espadas de Consenso Federal. | Los Andes

Otro distrito donde el oficialismo local irá con boleta corta y fue clave en 2015 -en este caso para Scioli- es Misiones. Aunque su tamaño (menos del 3% del padrón nacional) le quita dramatismo a la jugada.

Esta suma de pros y contras para cada fuerza acaso resuma la conclusión central: el apoyo de los gobernadores suma, pero tiene alcance limitado. Sobre todo este año, cuando sólo cuatro distritos unieron sus comicios a los nacionales: las dos Buenos Aires, Catamarca y Santa Cruz. Y en este último caso, con boletas separadas.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA