Dicen que el 13 es mala suerte, pero esto no fue así para el balonmano de Gimnasia, que con apenas ese número de partidos en su historia, consiguió el primer título y el ascenso a la Liga, lo que es muy festejado en el Parque por estos días.
El éxito llegó tras quedarse con el título del Clausura frente a Tupungato, al que se llegó por la mala inclusión de un jugador de Etiec en semifinales y la final anual ganada al propio Etiec por 35 a 34 en el alargue.
“Fue un partido inolvidable. Empatamos 30 a 30 y en el alargue hicimos el gol del triunfo a sólo 30 segundos del final. Había mucha pica con ellos por lo que había pasado en las semifinales del Clausura”, cuenta Lautaro Aguirre.
“La llegada a este club nos cambió la cabeza. La verdad es que el trato y todo lo que nos dieron nos han cambiado la cabeza", cuentan casi al unísono los jugadores, que en su mayoría llegaron desde el Gimnasio N° 1, donde habían pasado tres años juntos.
Cuando se lanzó la rama en Gimnasia era impensado que rápidamente se consiguiera un título, pero no para el grupo de jugadores que íntimamente sabían que las chances eran grandes. Así lo cuenta Diego Zeid, uno de los más experimentados. "Yo sabía que había mucho talento y que sólo necesitábamos tener la cabeza puesta en el juego. Es verdad que veníamos de ser últimos pero nadie nos había superado ampliamente", dice, y los resultados le dan la razón.
En cuanto a lo deportivo asegura que "en la etapa de play off conseguimos consolidar la defensa y desde allí construimos una solidez que nos permitió ser campeones". Diego hacía un año y medio que estaba sin actividad pero asegura que “nunca me voy. Siempre estoy volviendo”.
Una anécdota que tiene que ver con él es que históricamente jugó con la casaca nueve, pero en un partido la camiseta estaba ocupada, "jugó con la 15 y como la rompió, le dije que ahora tiene que jugar con esa", cuenta Claudio Fiochetti, dirigente que está a cargo de la rama y confiesa que se sorprendió cuando los jugadores le pidieron las camisetas con talle y número. “Cada uno usa la suya y no se cambian, una cosa que no pasa en el fútbol, que es a lo que nosotros estábamos acostumbrados. Para nosotros fue muy importante poder aprender muchas cosas nuevas y no fallar a la hora de los papeles. Una experiencia única que me ha dado mucho como dirigente”.
Otra situación que cuenta Fiochetti es: "Habían perdido un par de partidos y noté que se sentían presionados por eso. Hablé con ellos y les hice ver que el apoyo del club no dependía de los resultados. Se sacaron la mochila y fueron una fiera desde ahí hasta el final".
Claudio Mitriatti, técnico del equipo, vive un sueño y se le nota en la cara. "Es impresionante todo lo que estamos viviendo. Tenemos 40 jugadores entre los hombres, un equipo femenino y más de ochenta chicos que quieren formar nuestras inferiores. Todo lo que ha hecho el club, como prepararnos el camarín antes de cada partido del mismo modo que se le prepara al fútbol, ha llegado a Buenos Aires, desde donde se nos ha felicitado. Son cosas que no pasan en el balonmano".
"El club tiene un estilo de trabajo y una seriedad que nos ha sorprendido. Cumplieron con todo lo que nos dijeron desde la primera charla que tuve con los dirigentes.
El proyecto arrancó allá por marzo y se fue concretando sobre bases sólidas. La verdad es que haber construido una cancha en tiempo récord fue sorprendente", sigue contando el técnico.
"Otra cosa que a todos nos llamó la atención es que ya tenemos muchos chicos que quieren sumarse a las inferiores. También porque el equipo B y las chicas quedaron en la quinta posición, lo que muestra que vamos por el buen camino en todos los aspectos. Yo tengo confianza en que en la Liga de Honor vamos a hacer un buen papel. No sé si estamos para pelear el título, pero la realidad es que sabemos que nadie nos va a ganar por muchas diferencias", afirma el DT.
El plantel estuvo integrado por los arqueros Sebastián Gallardo y Leandro Castillo, los extremos son Sacha Niemetz. Sebastián Cuart y Julián Queirolo. El armador es Mariano Mitriatti. David Martín, Lucas Tieppo y Pablo Zeid son los pivot. Tomás Rosales y Germán López son laterales y Franco Pagano y Lautaro Aguirre, los centrales.