Ayer, el israelí Gil Pereg, que había ingresado fuertemente custodiado, no habló de hijos ni de gatos, solo maulló. Y se retiró de igual manera y, previo a entrar a la alcaldía de los Tribunales, ante la consulta periodística sobre si quería decir algo, respondió con un extenso maullido, para después perderse, con los uniformados, detrás de la puerta vidriada.
Concretamente, el juez Sebastián Sarmiento, en sólo 14 minutos de lectura, rechazó los argumentos de los abogados defensores Lautaro Brachetta, Maximiliano Legrand y Marcos Segovia (éste, ausente en la sala), además de la prisión preventiva (que agrava la detención que tenía), letrabó un embargo por 4 millones de pesos sobre sus bienes.
Las mascotas
También le dedicó un párrafo especial para responder a la defensa sobre el pedido -hecho el lunes- de libertad o el arresto domiciliario por el "apego con sus mascotas", el hombre tiene 37 gatos. Al recordar que existe un grave riesgo de fuga fue más allá, cuando señaló eso: "no soporta un test de razonabilidad. Sería como si alguien dijera lo mismo sobre un auto u otro objeto...".
También y como había sido pedido por ambas partes, el magistrado declaró nula la testimonial hecha por el hombre, como testigo, en el inicio de la instrucción. Así el criminal, de 36 años, aunque en la primer audiencia, dijo no saber su edad, ahora volverá al penal, por lo menos hasta que sus abogados apelen la medida ante un Tribunal, día que podrá volver a salir de la cárcel. En sus consideraciones el juez Sarmiento reiteró la crueldad puesta de manifiesto por el acusado al momento de matar a Pirhya Sarussi (63) y a Lily Pereg (54).
A su madre la estranguló y a su tía le disparó tres veces, con un revólver calibre 38, arma que fue encontrada en la propiedad de calle Roca, en Guaymallén, durante uno de los allanamientos cuestionados por la defensa, sumado al hecho de que ambos cuerpos fueron encontrados dentro del predio de calle Roca.
Después de que la sala de audiencias quedara vacía, el juez señaló que "acá se valoró el cúmulo de pruebas que ha ido incorporando el ministerio público y que son muy contundentes. Y en esta etapa procesal lo que se evalúa es si hay probabilidad que el imputado sea el autor de los hechos y en ese sentido creo que el Ministerio Público pudo demostrar, claramente, que existen elementos convincentes para vincular al señor Pereg en estos dos homicidios tan graves.
Gil Pereg, por ahora, deberá responder por dos hechos: homicidio agravado por el vínculo (por su madre) y homicidio agravado por el uso de arma de fuego (por la tía), delitos que sólo tienen, ya dentro del debate oral y público (con la posibilidad de que sea jurado) a la prisión perpetua como único castigo.