Desinhibida y decidida como pocas. Ella sabe lo que desea y lo intenta hasta poder lograrlo. Así se muestra Georgina Maribel Elevoff (22), soberana vendimial de Santa Rosa, elegida por todo su pueblo en la madrugada del 8 de enero.
Representante de Las Catitas, está orgullosa de su tierra y quiere llevarla a lo más alto.
En su caminar denota cierto recorrido artístico que la precede, ya que estudió comedia musical y sabe de danza, teatro y canto. Además, hasta hace algunos años formó parte de una banda de pop-rock. Paralelamente, está por recibirse de profesora de inglés por lo que le fascina la música en este idioma.
Como hija de un productor agrícola, le gustaría ser el nexo entre los que trabajan la tierra y el gobierno.
Es que su papá Gerardo ha vivido toda su vida del campo para sostener a la familia que completan mamá Adriana y el hijo varón, Gerardito.
-¿Cuál fue la reacción de ellos ante tu postulación como reina?
-Tengo que reconocer que primero mi papá no estaba muy de acuerdo, pero después de muchas charlas -porque al ser una familia muy chiquita tomamos las decisiones juntos- llegamos a un acuerdo.
Y cuando empecé a transitar este camino y me vio tan contenta, me empezó a acompañar y tuvo un cambio increíble: fue el primero en las barras y cuando me hacían notas él se quedaba esperándome. La verdad que ahora lo vivimos muy felices y esperanzados.
-¿Qué te motivó a presentarte?
-A mí me gustó la idea desde siempre. Muchas veces cuento que como yo vivo en una finca cuando era chiquita me paraba en un tacho con un palito y saludaba a todos.
Por supuesto que siempre ganaba porque era la única. Ahora de más grande me buscaron en varias oportunidades pero había dicho que no por miedo. Esta fue la tercera y me decidí.
-A diferencia de muchos jóvenes de tu departamento no te fuiste a estudiar a otro lado...
-No. Yo representé a las Catitas y vivo ahí. Estudio en el Instituto Superior de Santa Rosa el profesorado de inglés. Estoy en cuarto año y si Dios quiere me recibo este año.
-¿En qué te gustaría trabajar?
-Me gusta mucho el inglés y dar clases. Pero no me quiero quedar sólo con eso porque también me interesa mucho trabajar en bodegas desde la parte de turismo. Creo que se podrían complementar las dos cosas.
-Y de paso aplicás el inglés en tu otra pasión: el canto.
-Me gusta cantar en inglés, siempre he sido fanática de High School Musical y Cheetah Girls. Estudié en la escuela de comedia musical de Valeria Lynch por lo que tengo bases de danza, canto y teatro.
-¿Y qué otras cosas te gusta hacer?
-Estudié danzas árabes y españolas, me gusta mucho el arte. De los deportes he practicado hockey sobre césped, tenis y natación.
-¿Qué lugar preferís de tu departamento?
-Me gusta el río Tunuyán porque es un lugar muy tranquilo y pacífico donde uno puede ir, relajarse y pensar. Si bien en este momento no tiene mucho caudal sigue siendo un gran atractivo. Mucha gente se reúne y pasa tiempo con amigos allí.
-¿Cuáles son tus expectativas para este reinado?
-Tengo muchas porque por momentos pensaba que no iba a ser posible, que no lo iba a lograr y ahora que salí tengo muchas esperanzas de vivir un momento único.
Espero que tengamos muy buena predisposición con las chicas y que la pasemos bien en el hotel. Lo que más me entusiasma es la Vía Blanca y el Carrusel porque considero que son los momentos más lindos para una reina.
-¿Te ves como Reina Nacional?
-En realidad yo considero que si mi pueblo me eligió es porque me consideran con las habilidades. Sería una bendición muy grande para mí y tengo la esperanza de representarnos de la mejor manera.
¿Qué proyectos intentarías cumplir?
-Si tuviera la dicha de ser Reina Nacional me gustaría trabajar en dos ámbitos: en el turismo, considerando que tengo las herramientas de los idiomas porque también he estudiado portugués. Considero que es importante que aquellos que visitan las bodegas grandes conozcan cuán rica es la provincia.
Por otro lado, siendo hija de un productor me gustaría ser el nexo entre el pequeño y el mediano productor y quienes tienen las herramientas para asistirlos. Yo he visto a mi papá trabajar de sol a sol, soportando las inclemencias del tiempo, y lo vivo desde otro lado.
La pregunta real
¿Hay que seguir eligiendo reina de la Vendimia?
Sí. Yo considero que a nivel cultural es muy importante la figura de la Reina de la Vendimia, porque es tradición desde 1936.
Y creo que romper con una marca que nos diferencia a los mendocinos con el resto del mundo sería una verdadera pérdida. Además, está claro que no es un concurso de belleza, es mucho más que eso.
En la balanza
Noche / Día
Verano / Invierno
Asado / Pastas
Vestido / Pantalón
Cena romántica / Paseo al aire libre
Libro / Película
Mar / Montaña
Tinto / Blanco
Vendimia / Fiesta del Sol
*En negrita, lo seleccionado por la reina