El actor ha sido puesto a un régimen alimenticio por su esposa Amal. Fuentes aseguran que la joven esposa de George, quiere verlo lo más pronto posible en forma, por lo que le ha impuesto reglas que no son muy complicadas.
No beber alcohol, no comer carnes grasas y no consumir demasiados productos lácteos, pero lo que realmente sí le va a costar trabajo a Clooney es dejar la comida mexicana: su perdición.