"Quisimos relacionar lo propio, lo regional, con lo global", empiezan diciendo las dos cabezas fundadoras de Gauchito Club.
Todo empezó con un sueño, el que Gabriel Nazar tuvo hace unos años y del que se despertó con una palabra resonando en su cabeza. Había encontrado el nombre para la banda que deseaba formar, en la que la encontraba, al fin, lo autóctono y lo global.
¿Cómo derivó esto en una verdulería llamada "Guandanara"? Ahora es Sacha Nazar el que continúa la historia. El hermano del soñante se unió al proyecto cuando apenas era una idea. "La premisa era hacer bailar", dice concreto. Con los padres musicales del funk y la cumbia, salió la canción "El visto". Y así se empezaron a colar las historias cotidianas para influir en letras con "lenguage argentino, mendocino y de redes sociales".
Gauchito Club son actualmente Toby Deltín en bajo, Julián Bermejo en guitarra eléctrica, Nahuel Quimey Chandía en percusión y coros, Manuel Nazar en batería y coros, Sasha Nazar en voz y guitarra y Gabriel Nazar en voz, guitarra y teclas.
Lo interesante de esta generación es que ya no piensa en referentes internacionales. Cuando se habla de influencias, mencionan un arco local: “Entre la vanguardia de Usted Señalemelo y la fiesta popular de La Skandalosa”. Claro que hay algo de Illya Kuriaki que se filtra en este collage a dos voces.
Gauchito Club tiene, además, una fuerte apuesta visual. “Un poco aniñados”, dicen los Nazar para revelar ese lado lúdico con el que trabajan. Referencias a los dibujitos animados de la infancia o a María Elena Walsh se conjugan con una puesta que incluye vestuario original y cambios de look en vivo. De hecho, versionan un tema de la gran María Elena Walsh, “Que llueva, que llueva”, en clave de gospel y con la voz invitada de Francisca Figueroa, de Spaguetti Western.
¿Y la verdulería? Cuando empezaron, decidieron difundirse a través de videos. Uno de ellos consistía en filmar una hora de gente entrando y saliendo de la verdulería de su barrio. “Cuando decidimos hacer el disco, pedimos la verdulería para hacer el arte. La pintamos y le pusimos el cartel de ‘Guandanara’ y gustó tanto que lo dejaron”.
+Con ese espíritu refrescante piensan presentar el disco hoy, gratis y para todo público, en la Playa de Luján de Cuyo.
Gauchito Beach
Así quieren que sea: familiar, relajado y con las patitas en el agua. Su disco debut "Guandanara" se presenta hoy en La Playita de Luján, gratis y ATP. Una fiesta que contará con Dj (Guadalupe García Valls) más artistas invitados, y que arranca a las 17, con la banda chilena invitada "El cómodo silencio de los que hablan poco".
Desde la cumbia, funky, bolero, rock, reggae, salsa, hiphop, candombe, electrónica, indie, flamenco, Gauchito Club propone la unión de los extremos, “pasando por lo más autóctono, natural y futbolero, hasta lo futurista y urbano con el objetivo de lograr conocernos un poco más y hacernos cargo de quiénes somos”.
Ah, va a haber dos tributos: uno a Gardel, con una versión reggae del tango “Volver”, y otro a El Mayonesa, con una revisita a “Bacán”.
Sobre Guandanara
Gauchito Club editó en 2018 su esperado álbum debut, “Guandanara”, que registra 11 canciones.
“El visto” va de la cumbia al “acid jazz”, pasando por la salsa. “La pibita” es un retrato crudo de “lo expuestas que están”. “Chaparrón” cuenta el encanto de la voz de Francisca Figueroa de los Spaghetti Western; “La comunidad” tiene esa alegría sonora que brota por los poros y quizás la letra más esperanzadora del disco ( “si todos somos winners no hay fama / yo te quiero ver mejor que ayer / solo quiero que crezcamos y que seamos valientes / dejemos ir la bronca que somos el mañana”). No hubo mejor elección que invitar a La Skandalosa Tripulación para darle esa energía emotiva que ellos saben contagiar y un final que se baila sentado.
“Guandanara” muestra a los Gauchito Club conservando su sello de fábrica pero a la vez exhibe un crecimiento lírico y musical que significa un salto cualitativo en la escena local.