El precio del gas, que en Mendoza incide un 50% en las facturas de consumo, valdrá U$S 3,77 por metro cúbico que ingresa al sistema de transporte y distribución.
Aunque se sienta en los bolsillos la suba, del orden del 300%, se atenuará para los mendocinos, luego de que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, confirmara que en la provincia se podrá consumir más por el mismo valor, además de que la tarifa mínima, por efecto del amparo judicial, seguirá por debajo del resto del país.
En el marco de la audiencia pública para tratar el ajuste, la Nación aprobó una serie de cambios en los umbrales de las distintas categorías de consumo residencial del área que atiende Distribuidora de Gas Cuyana, que se elevan hasta un 40%.
Esto en función de un pedido en la anterior audiencia (noviembre 2016) para descomprimir el presupuesto de unos 349 mil usuarios en la provincia.
Por caso, una R-1, cuyo límite hasta ahora era 600 metros cúbicos bimestrales, ahora se extiende a 900 m3 (la solicitud era 1.000).
En el otro extremo, la R-3-4 pasa de 2.051 metros cúbicos a 2.201, con lo cual un salto de demanda no significará automáticamente cambiar de categoría y, por ende, pagar más por m3 .
Mientras por Twitter el gobernador Cornejo celebraba el hecho de que "la Nación atendió nuestro reclamo" y que "Mendoza pagará el gas más barato" que otras regiones, el secretario de Servicios Públicos, Sergio Marinelli, luego de defender la postura oficial, enumeró logros y temas pendientes.
"En la provincia partimos de una tarifa "amparada", con lo cual arrancamos hasta un 20% por debajo de la plena en otros puntos del país. Si bien en umbrales no es el máximo solicitado, implica que se podrá consumir más por menos", dijo el funcionario, antes de pedir mayor facilidad para acceder a tarifa social, que en la provincia tiene 87.475 beneficiarios (un 23%).
Antes, el subsecretario de Energía, Emilio Guiñazú, había sugerido analizar la situación desde "dos ángulos: el costo de producir y el precio al que llega a los usuarios. En los últimos 10 años el manejo de variables dejó al país en una crisis energética muy severa al punto que lo que hay no alcanza. Ese problema se resuelve adecuadamente financiado y estamos trabajando en tal sentido".
Por su parte, la ONG Protectora enfatizó la necesidad de una tarifa diferencial para Mendoza. "Hay cuestiones que se han corregido como la gradualidad, pero es una provincia fría y eso no se soluciona consumiendo menos. Por eso quiero llamar la atención para que se entienda", resaltó cubierto con una frazada el abogado José Luis Ramón, quien presentó un estudio del meteorólogo Federico Norte para fundamentar su planteo.
Hasta un 400%
Queda mucho por recorrer en materia de recorte de subsidios y, por lo tanto, se vienen más subas. El objetivo es llegar a U$S 6,80 a fines de 2019, salvo en Patagonia donde será en 2022, ventaja que también reclama Mendoza.
Aun así, durante la audiencia de la que Mendoza participó vía streaming desde el Centro de Congresos y Exposiciones, Aranguren también confirmó nuevos topes para los incrementos.
Si usted recibe una factura superior a los $ 250 (con impuestos) y no consume más de 1.400 m3, el tope de aumento respecto al mismo período del año anterior será de 300%. Entre 1.401 y 2.200 m3 no deberá superar 350% interanual, mientras por encima de los 2.201 se aplica un máximo de 400%.
Así, un usuario residencial mendocino R-1, al que hasta ahora le facturaban un valor unitario de $ 1,20, desde abril pagará casi $ 6. Y un R-3-4 pasa de los actuales $ 2,90 a casi $ 12.
Al respecto, desde Cuyana se abstuvieron de anticipar números. "Mientras no esté la resolución del Ministerio y sobre todo la modalidad de aplicación no podemos hacer proyecciones", se excusó Belén Durán, responsable de Relaciones Institucionales de la compañía.
La definición del impacto la realizará la cartera de Aranguren y los valores finales se conocerán dentro de dos semanas.