Unas 2,2 millones de personas comenzaron a percibir en sus salarios la devolución del impuesto a las Ganancias por la suba del 20% del mínimo no imponible y de las deducciones especiales anunciadas por el Gobierno tras las elecciones primarias.
Se trata de parte del dinero que fue cobrado por la
AFIP entre enero y julio. Y ahora el Estado les "devuelve" a los contribuyentes como medida contracíclica, para impulsar el consumo interno y morigerar el rebrote inflacionario.
La devolución, que se realiza reduciendo las retenciones de los próximos meses, se percibirá en dos cuotas, una este mes y otra en octubre. Los montos, según AFIP, van: de 8.124 a 20.331 pesos para una persona soltera; y de 20.404 a 26.895 para una casada.
El dinero "extra" que percibirán los asalariados debe figurar como "Beneficio decreto 561/19" en los recibos de sueldo que entregan los empleadores. A no desesperar: quienes cobraron agosto antes del 31 de ese mes, recibirán la devolución por fuera del sueldo en estos días.
Un análisis de Vanessa Toselli, de la Fundación Mediterránea, indica que tras la reciente modificación en el impuesto, la carga tributaria caerá hasta 5 puntos porcentuales promedio sobre el salario de los trabajadores.
La última actualización de Ganancias había sido del 28,3%. Con el 20% de ahora, en el Gobierno dicen que "se alinea el índice con el ritmo de la inflación". Para el tributarista César Litvin, la medida se quedó corta. "El aumento del piso imponible debería ser del 40,8%, porque así se contemplaría la inflación no computada del 2018", dijo.
En el Gobierno explican que no pueden hacerlo para no poner en peligro la meta de equilibrio fiscal primario comprometido ante el Fondo Monetario Internacional (FMI). Y señalan que los cambios realizados se compensarán con lo que ingrese por un mayor consumo.
¿Cuánta gente paga Ganancias?
Según los últimos datos disponibles del Ministerio de Hacienda en marzo hubo 2.169.593 trabajadores en relación de dependencia, autónomos, jubilados y pensionados afectados por el impuesto. Un 16,23% (o 303.025 personas) más que un año atrás.
Si se observan datos del Ministerio de Hacienda de 2015, ratificados por la actual gestión, en diciembre de aquel año pagaban Ganancias 1.175.478 personas. Entre diciembre de ese año y el mismo mes de 2018 el universo de personas afectadas saltó un 88,83%, es decir, se sumaron a pagar 1.044.138 personas.
Por otro lado, desde que Macri asumió hasta marzo de 2019 (último dato puesto a disposición por el Gobierno) el salto en el universo de personas afectadas fue del 84,57%, es decir, 994.115 personas.
¿Cuándo pagaron más?
El año en el que más personas se vieron afectadas por Ganancias fue el 2013, en el Gobierno de Cristina Fernández. El pico máximo fue de 2.447.800 personas en marzo de ese año.
En septiembre de 2013, en medio de una fuerte disputa con la Confederación General del Trabajo (CGT), la gestión kirchnerista descongeló las escalas e inició un fuerte descenso en el universo de personas afectadas. Esto impactó fuertemente en el fisco, aportando al déficit fiscal primario.
Si se observan los promedios de cada año reportados por Hacienda, en 2013 el tributo afectó a 2.070.910 personas. Esto fue superado en 2017, ya bajo la gestión Macri, con un universo de 2.128.369 contribuyentes afectados.
Un impuesto progresivo
El impuesto a las Ganancias es, coinciden tributaristas y economistas, el tributo más "progresivo" por la concepción de "solidaridad": lo que se le cobra a quienes mejores ingresos tienen "derrama" sobre los más humildes a través de políticas sociales.
Eliminar este impuesto para trabajadores en relación de dependencia, autónomos y jubilados había sido una de las propuestas centrales de la plataforma electoral de Macri en la campaña presidencial de 2015. La realidad fiscal y la crisis económica hicieron cambiar de visión al Presidente.
Desde su asunción, el aumento de la presión tributaria se registró sobre lo que se entiende por ganancias de cuarta categoría a los ingresos que se obtienen como resultado del trabajo personal en relación de dependencia, o en forma autónoma con el ejercicio de profesiones liberales.
El drama estuvo dado porque lo acompañó un proceso de caída real de los salarios por el impacto de la inflación, dado que las negociaciones paritarias, al menos de algunos sectores, se fueron cerrando por debajo de la suba del costo de vida. Eso arroja una diferencia con 2013: el salario medido en dólares es de menos de la mitad.
Tras perder en las elecciones primarias del 11 de agosto, el Macri anunció las modificaciones en este impuesto por lo que se prevé que el número de obligados a pagarlo podría volver a caer por debajo de los 2 millones al finalizar este año.