- ¿Para usted el caso de los cuadernos evidencia que hubo corrupción durante el gobierno kirchnerista?
- Esto es toda una operación del Gobierno, la Justicia y los medios, que además la estaban preparando para el año que viene, que es electoral, pero tuvieron que sacarla de la galera de manera anticipada debido a la situación económica apremiante que estamos viviendo.
- Los cuadernos pueden ser reales o falsos, pero hay por primera vez empresarios y exfuncionarios arrepentidos y detenidos...
- Yo creo que los cuadernos son apócrifos, pero no creo que esto sea una cuestión de si son ciertos o no. Sí creo que se debe auditar toda la obra pública, como lo pidió la propia expresidenta, que presentó un proyecto reclamando la constitución de la comisión bicameral de la obra pública. En la última sesión del Senado, Cristina planteó que esto no comenzó en su gobierno sino hace mucho tiempo, y justamente tiene que ver con lo que formó la familia Macri desde hace muchos años en la época de la dictadura, cuando multiplicaron su capital.
- Pero Bonadio puede citarla a declarar y disponer allanamientos.
- Lo que Bonadio no puede hacer es obligar a los empresarios a que declaren lo que él quiera con el fin de involucrar en esta causa a Néstor y Cristina, que es la primera en ponerse a disposición de la Justicia, someterse a derecho y habilitar los allanamientos a sus domicilios, como lo hizo hace dos semanas.
- ¿Cristina puede ir presa?
—La quieren llevar presa, por supuesto. Es la intención del Gobierno y de Bonadio. Macri lo dijo explícitamente, lo dijeron funcionarios nacionales. Está persecución que se lleva adelante desde finales de 2015 tiene que ver con proscribir a la principal líder de la oposición, la única que tiene capacidad de pelearle en las urnas al Gobierno. Y esta operación se inscribe en una estrategia regional de proscripción de los líderes populares. Lo vemos en Brasil, con Lula Da Silva, y en Argentina, con Cristina Kirchner.
- ¿Cómo está anímicamente la expresidenta?
- Ella está muy firme, como siempre. El jefe de nuestro bloque de diputados, Agustín Rossi, lo dijo claramente: mientras más le pegan, más fuerte se pone. En un país donde hay una caída de la industria del 8,4%, donde ha bajado un 10% el consumo en los supermercados de los barrios populares, de hay semejante pérdida del poder adquisitivo, con un dólar a 39 pesos, tenemos que discutir otras cosas, no estas operaciones.