"Los campeones están hechos de algo que tienen dentro de ellos: un deseo, un sueño, una visión". Esta frase emblemática de Mahatma Gandhi. abogado, político y pensador indio del siglo XIX y XX, cabe a la perfección para explicar este fenómeno de la Selección Mendocina de Futbol de Salón, pentacampeón Nacional.
La química que existe entre los jugadores, perdón, amigos, es innata. Se conocen de memoria. Es que esta Selección provincial lleva un proceso de trabajo que acumula 5 años. Arrancó en los primeros días del 2017. Y consiguió su primera medalla de oro en el mes de agosto. Se cortó un sequía de siete años sin gritar campeones, ya que la última vez que Mendoza se había calzado la medalla de oro había sido en San Rafael en el 2008. Y esta vuelta olímpica fue la puerta para llegar a lo más alto. Y el desafío inmediato fue mantenerse. Bajo la conducción de Armando Corvalán, la Borravino lo logró con creces. Campeón 2016, 2017, 2018 y hace unos días, conquistó el Campeonato Argentino disputado en Santa Cruz.
Señores ¡de pie, por favor! Somos testigos de la Generación Dorada del fútsal mendocino. Indiscutible. Y más si tenemos en cuenta que siete jugadores que integraron esta Selección, se consagraron campeones del mundo en Misiones durante este año con Argentina: Mescolatti, Grasso,Pires, Koltes, Páez, Pérez y López. Los jugadores caminan por la calle y la gente los reconoce, le solicitan una foto, un autografo o un simple intercambio de sonrisas. El futsal rompió todas las barreras. Se convirtió en un deporte popular y estos jugadores son los máximos responsables. Tras varias días de festejo y descanso, Martín Cusa, Gastón Fernández, Gonzalo Pires y Matías Scafetti, visitaron la redacción de Más Deportes y compartieron su alegría y expresaron sus sensaciones.
El primero en tomar la palabra, fue el experimentado Martín Cusa, hombre de mil batallas y por lo que demuestra en cada práctica y cada partido, tiene cuerda para rato. Porque el hambre de gloria que posee, es admirable y contagioso. Sobre la magia que tiene este plante, opinó: "La clave del grupo es el hambre de gloria que tiene. Este proceso de cinco años, lo integramos como 30 jugadores. Todos tenemos la misma sintonía. Otra explicación no cabe. Existe una ilusión de seguir ganando cosas, de mantenernos arriba. Esta pasión y estas metas, pocas veces se ha visto en algunos equipos, en algunos grupos. Es la única fórmula. Y el plus, es la sana compentencia entre nosotros, el compañerismo y la solidaridad. Es un grupo que se construyó para ser campeón y trabaja seguir siendo campeón".
Inmediamente, tomó la posta Gonzalo Pires. Fiel a su estilo y como si tuviera el balón bajo su suela caramelo, paralela infernal e infla una vez más la red rival. El campeón del Mundo, explicó: "Este plantel tiene unas ganas de triunfar que no tiene límites. Todos quieren estar, todos quieren jugar. El que tiene dudas, de cómo se trabaja, tiene que ver en los entrenamientos que se ejecutan previo a cada campeonato. El grupo tiene un sólo objetivo: mantener a Mendoza en lo más alto".
Llegó el bautismo de fuego para el poste del Jockey Club, Matías Scafetti, jugadorazo, que a pesar de su experiencia, ganó su primer título con la Selección Mendocina. Al respecto, expresó: "Yo viví esta experiencia por primera vez y es admirable como Mendoza se convirtió en el gigante a vencer. Es increíble lo que transmiten los chicos en cada acción: entrenamiento, partido, concentración. Vi muchas cosa positivas que jamás me había imaginado presenciar. Es un privilegio único, pertecer a este plantel".
Por último, la "Gata" Fernández, crack Azulgrana, expresó: "vestir la camiseta de la Selección es lo más lindo que te puede pasar. Y seguimos ganando títulos, porque los jugadores más grande, nos indican el camino correcto. Somos un equipazo".
Mendoza no necesita recambio. Sólo necesita continuar alimentando, esta sangre de oro y pasión.
Secretos de oro
-Los dormilones. Por unanimidad, la pieza de Gonzalo Aveiro y la Gata Fernández, fue la elegida como los remolones del plantel.
-El puntilloso. También fue por unanimidad: Gonzalo Pires. "Hay que mimarlo, porque cambia su humor de inmediato", dijeron.
-Rock o cuarteto. El dueño del parlante, Carucha Grasso. Sin embargo, la música la pusieron los más chico: cuarteto, cumbia y reggaetón.
-Lectura o videos juegos. Martín Cusa fue el integrante de la Selección que llevó libros para sus momentos de ocio. "Nadie lo vio leer".
-¿Cábalas?. El DT Corvalán come todos los días el mismo menú. "Las otras mañas, imposible contar, nos cortan a todos...".