El Club Atlético River Plate, en una campaña tan mala como llamativa, el equipo que supo ser comandado por Ale Pérez, algunas fechas por los hermanos Sansone y finalmente en las últimas jornadas por Emiliano Scocchera, apenas pudo ganar cinco partidos en la temporada y en la noche del viernes, tras caer 5-1 con América, quedó sin chances de pelear a una fecha del cierre.
Ya lejos de las épocas gloriosas, River en estos últimos años pudo ganar dos Copas Argentinas pese a no haber entrado en playoff desde su vuelta a la definición de los torneos oficiales, pero este año no logró consolidarse en todo el certamen y la A, más competitiva que nunca, le pasó factura. Con apenas 21 puntos sobre 87 posibles, River se condenó al descenso, que lo pondrá por primera vez en su historia en la B.
Con el antecedente de lo que sucedió en cancha grande, la ilusión del deporte pasará por imitar y volver más fuertes que nunca, pero para eso se deberá trabajar en muchos puntos importantes, sin subestimar nada ni nadie, desde la parte estructural, hasta el armado de un futuro plantel.
