Miles de kilómetros han hechos los más cercanos para ver a sus seres queridos en Misiones. Tuvimos el placer de hablar con Martina Palmarochi, novia de Renzo Grasso y Julieta Vega, novia de Gonzalo Pires y dejaron muchos tips importantes para tener en cuenta.
Las chicas, junto a la familia de Nicolás Páez y de la novia de Luciano González, Gisela Gamero están hospedadas en el mismo hotel en El Dorado y se mueven en grupo para las diferentes sedes. “Estamos a disposición de los chicos, si necesitan algo vamos y los visitamos cuando tienen un ratito libre” comentó Juli Vega.
En cuanto a lo que requiere la competencia, Martina manifestó “vimos que los chicos están muy bien preparados de forma física y grupal. Tienen la suerte de tener el apoyo del cuerpo técnico y tenemos fe que sea su Mundial”. Además, Vega agregó “es un grupo muy unido, con buenas personas y con mucha confianza. Los vemos de la mejor manera para enfrentar lo que queda”.
Por último, mencionaron el esfuerzo y dedicación que tienen los jugadores por el fútbol de salón. “Estamos muy orgullosos por todo lo que dejaron de lado por esto. Sabemos el sacrificio que han hecho al irse a Italia para prepararse de la mejor forma” declaró Juli. A su vez, Palmarochi dijo” en cuanto a Renzo siempre es su deseo volver a Mendoza y jugar en Cementista. Estoy contenta de ser parte del gran sueño de él”.
Cabe destacar que los familiares no la han pasado de la mejor manera en los estadios. Han sufrido con el tema del ingreso y la ubicación, tanto fue así, que, en Posadas hubo conflictos que, por suerte, no pasaron a mayores. Aunque los jugadores argentinos hicieron sentir su malestar.
En este caso vimos dos protagonistas, dos familiares que son parte del sueño de los argentinos. Que con su apoyo y condicionalidad son parte fundamental para los de Avveduto. La fuerza de los muchachos viene por ellos.