Jugadores de Gimnasia de Jujuy agredidos, amenazados con arma blanca y robados por una turba de casi un centenar de hinchas en la concentración del plantel, y un futbolista de Unión y sus amigos asediados en su casa tras el clásico santafesino marcaron nuevos hitos de la violencia en el fútbol argentino.
El sábado por la noche en la concentración del conjunto jujeña hubo temor entre los futbolistas: "Eran como cien, vinieron a robar, no a apoyar. Amenazaron a un compañero con un arma blanca", contó Maximiliano Cavallotti, en referencia al joven Matías Molina.
Hubo agresiones y futbolistas que terminaron en ropa interior por los robos de los supuestos hinchas algunos pasados de alcohol, que llevó a los jugadores a dejar la concentración e "ir a buscar seguridad" a sus respectivo domicilios.
Volvieron al día siguiente para el partido ante Crucero del Norte por la fecha del Nacional B.
El jugador Luis Vila dio más detalles de lo que fue un momento delicado para todo el plantel: "A Enzo Serrano le dieron una piña en la boca y le robaron la ropa del club; a Milton (Celiz) y Matías (Molina) les apuntaron con un cuchillo”.
“Como el sábado era el aniversario del club (fue creado el 18 de marzo de 1931) hubo un banderazo en las afuera del hotel. Había gente con sus familias y por eso decidimos salir a sacarnos fotos, pero al ratos aparecieron hinchas que estaban borrachos y drogados”, dijo.
Dirigentes del Lobo jujeño repudiaron hoy los hechos ocurridos y los incidentes están siendo investigados por la justicia provincial.
En Santa Fe fueron hinchas contrarios los que se la tomaron contra Emmanuel Britez, defensor de Unión y un grupo de amigos que estaba en la casa del futbolista en el barrio Guadalupe, de Santa Fe.
Cuatro personas fueron detenidos el domingo luego de la denuncia que hizo Britez a la policía. Los agresores lanzaron una botella contra uno de los amigos de Britez, además de hacer pintadas en la vereda del domicilio.
Todo había empezado como una cargada por la victoria de Colón sobre Unión, pero la cosa tornó a mayores.
Franco Varetto, amigo de Britez, y presente en ese momento, contó que le pidieron a los agresores que vayan a festejar a otro lado.
De acuerdo al diario El Litoral, la policía detuvo a cuatro personas que circulaban en un Ford Focus blanco, tres de ellos mayores.