Durante el tratamiento del Presupuesto 2014 ha surgido un dato más que llamativo. A los dos órganos de control que tiene la Provincia, Fiscalía de Estado y Tribunal de Cuentas, se les bajó drásticamente el nivel de gastos que pretendían para el año que viene. El caso de Fiscalía es dramático porque se le ha asignado mucho menos dinero del que terminó gastando este año, mientras que el Tribunal no podría aplicar el nuevo escalafón que ya firmó con los trabajadores del organismo.
No es un dato menor, puesto que el drástico recorte que afecta el funcionamiento de los órganos de control del gobierno tiene lecturas simbólicas polémicas: a priori alimenta la idea de que el controlado condiciona al controlador. El dato surgió en la reunión de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de Diputados, donde concurrieron el presidente del Tribunal, Carlos Farruggia, y el fiscal de Estado subrogante, Javier Fernández.
El caso del Tribunal de Cuentas es el menos pintoresco y tal vez porque su gente no ahondó en detalles acerca de las carencias. Lo que si quedó claro, de boca del propio Farruggia, fue que pidieron 80 millones de pesos y que el Ejecutivo ha previsto en el proyecto para ese organismo 68 millones.
En el encuentro nadie habló de lo verdaderamente ejecutado en 2013, pero el presupuesto votado por la Legislatura para este año fue de 63 millones de pesos. Es decir, el incremento para el año que viene es del 18%, cuando la pauta de gastos de todos los ministerios creció algo más del 25%.
Tal vez no sería tan grave el panorama del Tribunal, si no fuera por un hecho delicado. Durante este año se estuvo discutiendo un escalafón exclusivo para la repartición. Después de una dura discusión, se logró acordar y se está a la espera de la homologación de esa nueva estructura salarial.
Es por eso que el órgano de control había pedido 80 millones de pesos, para poder aplicar ese nuevo escalafón. Ahora, con el recorte, ese escalafón correrá riesgos y también habrá conflictos sindicales por ello.
Yendo sobre la Fiscalía de Estado, hay más datos para describir una situación casi irónica. En 2013 tuvieron un presupuesto de casi 84 millones de pesos, pero para 2014 la pauta remitida por el Ejecutivo vino con una importante poda: apenas 56 millones de pesos, es decir 30 millones menos, a pesar de la inflación.
En 2013, Fiscalía ha gastado poco más de 21 millones de pesos en salarios. A pesar de que se habían presupuestado algo más de 15 millones de pesos, el impacto de las paritarias subió el monto ejecutado finalmente durante el año que termina. Pero, en el presupuesto 2014 lo previsto en la Ley de Presupuesto son 20 millones de pesos, es decir, menos de lo ejecutado este año. Más aún, lo presupuestado para este año en contratos de locación de servicio ascendía a 690 mil pesos. Para el año próximo se presupuestaron 611 mil pesos, casi 80 mil pesos menos.
En bienes corrientes también hubo una poda. Para 2013 se presupuestaron 200 mil pesos, para el 2014 la Fiscalía tendría autorizado gasto por 114 mil pesos.
Para el año que viene, la Fiscalía pidió para servicios generales, bienes corrientes y de capital $ 2.149.800, pero lo que ha presupuestado el Ejecutivo es apenas 381.698,17.
Para que se entienda: bienes corrientes son insumos de oficina, limpieza, cartuchos de impresora, nafta para vehículos; servicios generales incluye servicio postal, capacitación de personal, fotocopias, seguro de automotores, reparación de vehículos y pasajes para viajes en comisión; bienes de capital incluye muebles, computadoras, auto. Es decir, todas cuestiones de uso permanente, necesarias para el funcionamiento cotidiano de la Fiscalía de Estado.
Quizá uno de los casos más llamativos sea la necesidad de realizar un cableado de red a nuevo en las oficinas de la Fiscalía en el primer piso de Casa de Gobierno. Según la ART, supone un riesgo para el personal que trabaja allí, por lo que se solicitó 300 mil pesos para hacer esa obra. Al momento de calcular el presupuesto 2014, para ese ítem quedaron 0 pesos.
Otro caso llamativo es el de las computadoras. Desde la Fiscalía indican que hay una computadora cada ocho abogados que se desempeñan en el organismo.
Además, se solicitaba fondos para instalar un servidor propio de uso exclusivo de la Fiscalía, porque actualmente las máquinas están en red con el resto de las máquinas de Casa de Gobierno, lo que implica que se puede "espiar" lo que hay en las máquinas del ente de control, aún bajo supuesto de que haya personal y funcionarios investigados. Para compra de máquinas y servidor propio se había pedido 258 mil pesos. Lo presupuestado finalmente fueron 40 mil pesos.
Una de las partidas más abultadas es la de pago de juicios contra el Estado. Actualmente, la Fiscalía tiene un largo listado de juicios, por los que debe pagar 60 millones de pesos. En el presupuesto de este año la partida fue de 67 millones de pesos, para el año próximo quedó en 35 millones.
"Esos juicios no son de la Fiscalía de Estado, son de toda la Administración pública", decía ayer el subrogante Fernández. El problema es que, con los juicios con sentencia, si no se pagan, vienen los embargos a otras cuentas del Estado, particularmente las de sueldos.