Los principales dirigentes de Cambiemos enviaron ayer un fuerte mensaje de unidad política en torno al presidente Mauricio Macri tras las medidas de ajuste fiscal y aumento de las tasas de interés dispuestos el viernes pasado para contener la corrida en el mercado financiero.
Así, con la presencia del Presidente, la Mesa Nacional de la coalición que integran el gobernante PRO más la UCR y la Coalición Cívica, hizo a un lado las diferencias internas incipientes que habían aflorado hace un par de semanas, sobre todo en torno ante el malestar social por los fuertes aumentos en las tarifas de los servicios públicos, en especial el gas.
Urgido por la corrida en el mercado financiero, optó, en cambio, por cerrar cualquier tipo de grieta interna, en una reunión de alrededor de una hora en el Salón Científicos Argentinos del primer piso de la Rosada, después de que allí mismo Macri evaluara durante una hora y media el “satisfactorio comportamiento de los mercados”, al decir de un vocero del Ministerio de Hacienda, en el primer día hábil tras los anuncios del viernes.
Fue en una reunión con integrantes del equipo económico, con Nicolás Dujovne y Luis Caputo (Finanzas) y el titular del Central, Federico Sturzenegger, entre ellos.
"Se ratificó el rumbo político, económico y social, sin dejar de admitir las dificultades con las que nos encontramos y que tenemos", dijo a los periodistas como vocero principal de la reunión, el gobernador mendocino y titular de la UCR, Alfredo Cornejo, junto a sus pares del PRO, el senador misionero Humberto Schiavoni, y de la CC, la diputada Maricel Etchecoin.
Hace dos semanas Cornejo había sido desde la UCR uno de los voceros principales contra los ajustes tarifarios en el gas y había criticado con dureza por ello al ministro de Energía, Juan José Aranguren, lo que derivó en que la Rosada accediera a la propuesta de un pago en cuotas.
Cornejo aseguró que el Presidente se mostró "muy confiado" con las medidas adoptadas el viernes pasado y les ratificó que "el rumbo económico es el correcto", antes de insistir en un argumento recurrente del Gobierno respecto de la situación que encontró en diciembre de 2015, aun cuando lleva ya 30 meses de gobierno: Estaba todo preparado para una bomba de tiempo que estallara en el gobierno de Cambiemos, pero el Gobierno aplicó un mecanismo de relojería para desactivarla.
“Es un esfuerzo para reducir el déficit y hacer crecer la economía”, dijo Cornejo, quien sin más agrego: “Es un esfuerzo que reconocemos mucho, fundamentalmente a sectores pobres y medios, que son los que en general están bancando este proceso con muchísimo esfuerzo: Les decimos a ellos de nuestra profunda admiración (sic) y les ratificamos que seguiremos trabajando”.
Durante la reunión, de la que participaron los jefes de los bloques e interbloques del oficialismo en Diputados y el Senado, junto con el presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, se definió también la estrategia legislativa a seguir en torno al proyecto opositor antitarifazo. Así se acordó los diputados que en la sesión de mañana sostendrán la posición gubernamental sobre tarifas: las causas de su atraso y la facultad del Ejecutivo para definir las tarifas, que "no pueden ser dirimidas en un debate demagógico del parlamento".
“Cambiemos está monolítico”, insistió Cornejo. El gobernador mendocino apuntó luego que hay un acuerdo con la oposición para que “sea una sesión tranquila, no como fue la de la reforma previsional”.
El macrista Schiavoni, por su parte, confió en que el Gobierno logrará sobrellevar en el Legislativo el tema tarifas: "Confiamos en la propia fuerza y en la racionalidad que representan los gobernadores que entienden que no se pueden afectar las cuentas públicas".
Nada se dijo en la reunión acerca del detalle provincial sobre la reducción de los 30 mil millones de pesos previstos para obras públicas. Tampoco conversaron sobre la estrategia electoral, cual había sido la agenda prevista para este segunda reunión de la Mesa, que se iba a hacer en al cordobesa Rio Ceballos.