El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, y su antecesor kirchnerista, Axel Kicillof, mantuvieron hoy en la reunión de comisiones de la Cámara de Diputados sobre la deuda un duro cruce sobre la negociación con los "fondos buitre", lleno de pases de factura, réplicas y chicanas.
Kicillof reveló que, mientras estaba al frente del ministerio de Economía, los holdouts "nos ofrecieron un mejor trato, pero no estábamos con este apuro imperioso de negociar" como el actual Gobierno.
Prat Gay, por su parte, le retrucó que el gobierno que él integraba "fue cómplice" del conflicto con los "fondos buitre", como los llamó el actual ministro, y le enrostró a Kicillof haberle pagado todo al Club de París, sin conseguir nada a cambio.
"Te fuiste en un avión, 48 horas, le pagaste 100% con todos los punitorios y no entró una sola inversión. Y el Club de París todavía nos pone la peor nota, pese a que estamos al día tras semejante acuerdo", despachó.
Durante la reunión informativa del ministro de Hacienda y Finanzas ante los diputados, Kicillof resaltó cuando le tocó hacer uso de la palabra que "no es cierto que esto (la deuda en default) lleva 15 años por desidia" y recordó que durante la gestión kirchnerista "se negoció con 93 por ciento de los bonistas" en los dos canjes de títulos que se hicieron.
"También se le pagó al FMI. Ahora van a venir con que el Fondo nos quiere ayudar. A mí me ofrecieron 10 mil millones en el FMI si agarrábamos el artículo cuarto", agregó.
Prat Gay escuchó todos los argumentos de su antecesor y, en tono coloquial, al momento de responder manifestó que la administración kirchnerista "en algún punto fue cómplice, porque le facilitó la vida a los buitres".
En relación a los dichos del ex ministro sobre los bancos que apoyan financieramente al actual gobierno, Prat-Gay le retrucó que "esos bancos que vos nombraste, Axel, son los mismos bancos que vos contrataste para la última emisión de deuda que después generó el problema en Nueva York y esos bancos se quedaron con una comisión de más de uno por ciento".
Kicillof enmudeció y Prat-Gay fue más fuerte aún, en relación a los dichos de su antecesor sobre los "festejos" de Paul Singer, titular de los fondos más duros:"Singer no sé qué está festejando, pero seguro que está festejando todavía es (Antonio) Brufau por los bonos que recibió de Repsol".
Por eso, sin alterarse ni perder la calma, el ministro sugirió que "no nos metamos en este barro Axel" y remarcó que en el gobierno de Mauricio Macri "estamos tratando de resolver una cuestión que heredamos y lo metimos en la campaña y pasó lo que pasó".
Prat Gay recordó también la salida del cepo que encaró la administración macrista apenas llegó al poder y apuntó que "el cepo, dicho sea de paso, es consecuencia de no haber arreglado antes" con los holdouts.
Por otro lado, provocó a Kicillof al atribuirle que estaba "preocupado por los pesos que se van a emitir para comprar dólares y no se preocupaba por los pesos que se emitían para crear inflación".
Como Kicillof pedía la palabra para responder porque había sido aludido, Prat Gay le recordó que "yo antes estuve en tu lugar y nunca pude hablar más de 2 minutos. Tomemos esto como un cambio de régimen".
Kicillof se quedó sin oportunidad de replicarle al ministro.